Diego Maradona ha sido ingresado en la clínica Güemes de Buenos Aires por decisión de su médico, Alfredo Cahe, a causa de una descompensación física que, según un breve parte médico, no tiene relación con el consumo de drogas peligrosas.

El breve parte distribuido minutos después de su ingreso al centro asistencial aclaró que el nuevo problema de salud que el astro argentino ha sufrido no está relacionado con el consumo de drogas peligrosas. "El paciente Diego Armando Maradona ha ingresado al sanatorio para la realización de estudios complementarios debido a una descompensación. La misma no está relacionada con la adicción a drogas peligrosas", dice.

Maradona fue trasladado desde la casa de sus padres, situada en el barrio porteño de Villa Devoto, en una ambulancia dotada con elementos de atención para enfermos con problemas cardiacos, precisamente un problema que le llevó al borde la muerte en 2002.

El fin de semana pasado Cahe indicó que Maradona estaba a punto de viajar a Suiza para someterse a un tratamiento debido a que en los últimos tiempos ha subido de peso por falta de aplicación en su conducta alimenticia.

Cahe precisó que estaba excedido en alrededor de cuatro kilos y dijo que era necesario alejarlo de sus amigos y su entorno para iniciar un nuevo tratamiento de recuperación. "Está fumando tres o cuatro habanos por día. Para él que no fumaba nada, es demasiado. Pero Diego es un paciente obediente después de lo que hemos pasado en el sentido de tomar la medicación", comentó el médico. Añadió que "no consumió más cocaína, pero eso no quiere decir que uno no siga trabajando en la personalidad de tipo adictiva" de Maradona.

La liturgia argentina se ha repetido una vez más y en el entorno de la clínica donde está el genial ex futbolista se acumulan los fans del astro que dejan mensajes en las paredes deseando su recuperación y decenas de cámaras de televisión que aguardan la llegada de amigos y familiares de Maradona.