A Fernando Vázquez se le desmoronan los planes. Las lesiones de jugadores son incesantes y los procesos de recuperación de algunos de ellos van a menor velocidad de lo que desearía el entrenador céltico. El parón liguero ha resultado menos efectivo de lo que esperaba Vázquez, que ayer resumió el momento con cierto pesimismo: "La situación es delicada". Oubiña y Contreras ya recibieron el alta médica, pero otros como Iriney o Guayre aún no están en óptimas condiciones. A ellos se sumó ayer Jonathan Aspas, con un leve esguince en el tobillo izquierdo. Además, se desconoce el estado físico en el que llegarán Tamas y Ángel de sus compromisos internacionales.

"Claro que estoy preocupado, pero sé cuál es la situación y hay que afrontarla", convino el técnico compostelano, que no se resigna a asumir tantos contratiempos. Para Vázquez, el Celta vuelve a sufrir "una situación extraordinaria" en vísperas de jugar una de las once finales que le restan hasta concluir la temporada. A las nueve bajas que aparecían ayer en el parte médico hay que sumar la de Canobbio por sanción.

Fernando Vázquez tenía puestas las ilusiones en recuperar a la pareja titular de mediocentros, teniendo en cuenta las dos semanas de descanso que había por delante debido a los compromisos de las selecciones nacionales. Por el momento no es posible: Borja Oubiña, lo mismo que Pablo Contreras, se reincorporó ayer a los entrenamientos; Iriney Santos, no.

Pero el preparador céltico no pierde la esperanza: "Espero contar con estos dos [Oubiña y Contreras] y con alguno más". Aunque asume que ya queda poco margen hasta el domingo: "De todas maneras, el tiempo es justo, los entrenamientos son justos y todo está cogido por pinzas, incluidos Borja y Contreras".

En su comparecencia tras el entrenamiento de ayer, Vázquez dejó algunas frases de optimismo: "Respecto a Iriney hay que esperar. Él quiere jugar, a mí también me gustaría que estuviese...", por lo que admitió incluso que si el futbolista quiere está dispuesto a asumir algún riesgo para que juegue ante los merengues.

Partido éste que definió como de "incógnitas", porque dijo desconocer cómo jugará y qué equipo presentará Capello, mientras que tampoco tiene clara la estategia que empleará el Celta por la incertidumbre de las lesiones. Eso sí, espera un "partido igualado", pero recuerda que el Real Madrid "siempre es favorito".