El corredor ruso del Caisse D'Epargne, Vladimir Karpets, se convirtió ayer en el primer líder de la XXII Vuelta Ciclista a Castilla y León tras imponerse en la primera etapa, Zamora-Zamora, una contrarreloj individual de 10 kilómetros, con un tiempo de 11 minutos y 55 segundos. La crono supuso el arranque de temporada de Óscar Pereiro que se quedó lejos de su compañero de equipo.
El corredor del conjunto español aprovechó que el suelo del trazado estaba más seco, para conseguir el mejor registro de una contrarreloj que se vio deslucida por la lluvia, y que impidió a los ciclistas más importantes de la ronda castellanoleonesa como Iván Basso, Denis Menchov o Alberto Contador, comandar la general.
Además de la lluvia, el complicado recorrido de la etapa, con curvas muy cerradas, hizo que los especialistas se mostraran excesivamente prudentes, por miedo a una posible caída.
Pavimento seco
Así, Karpets, se valió de unos momentos en los que el pavimento zamorano no estaba muy húmedo, para establecer el mejor tiempo de una clasificación provisional que anteriormente lideraron el español Egoi Martínez y el francés Florent Brard.
Martínez, que milita en las filas del Discovery Channel, estuvo en posesión del mejor registro de la etapa durante varios minutos, pero Karpets arriesgó un poco más, lo justo para que las ilusiones del corredor español se desvaneciesen y tuviera que conformarse con el segundo puesto.
Karpets, Martínez y Brard, lideran la clasificación de la general tras la disputa de una primera etapa en la que el conjunto estadounidense del Discovery Channel, dirigido por el ex ciclista Johan Bruyneel, situó a cinco corredores entre los diez primeros.
Por su parte, dentro de la participación del Karpin Galicia Santos González y Gonzalo Rabuñal finalizaron en los puestos decimooctavo y vigésimo, respectivamente, a 24 segundos del ganador. Por equipos la formación gallega finalizó en sexta posición entre los dieciséis participantes.
