Aunque la salvación del Celta Cometal puede llegar por la vía administrativa, la plantilla que prepara Tomás de Dios exprime sus opciones deportivas. La visita al Barcelona del sábado (19.00) resulta crucial en esta batalla. Los azulgranas, con siete puntos de ventaja sobre los vigueses, son su horizonte deseado al ocupar la plaza de promoción. De Dios basará su táctica para el Palau en la solvencia defensiva, sobre la que ha intentado reconstruir el equipo desde su llegada. No se quiere dejar ningún detalle al albur y de ahí que la directiva también haya movido sus hilos para garantizarse una equidad arbitral que cree comprometida. La Liga ha elegido para el choque a una pareja vasca de escaso lustre. El Celta, descontento con los últimos arbitrajes que ha sufrido, ha pedido al presidente de la Comisión Técnica, Pedro Ángel Galán, que un delegado federativo asista al choque. Alberto Sánchez ha sido designado para este cometido.