El Pilotes Posada quiere cerrar la vigesimocuarta jornada de la División de Honor B más cerca del ansiado ascenso a la Liga Asobal. Para cumplir ese objetivo, los académicos están obligados a ganar está tarde en el pabellón Severo Ochoa al Alcobendas y que el Frigoríficos del Morrazo haga lo mismo en su partido con el Prasa Pozoblanco. Si este guión se cumple a rajatabla, el Octavio se asentaría en la segunda plaza de la clasificación -incluso podría ser primero si Teucro Ence pierde en Gijón-, con cinco puntos de ventaja respecto al equipo andaluz de Paco Castillo.

Los "rojillos" son conscientes de que están en uno de los momentos más decisivos del campeonato y en el que cada error se paga con un alto precio. Una derrota frente a los hombres de Rafael Guijosa significaría un peligroso paso atrás para los intereses del cuadro vigués. "Nos espera un partido muy duro ya que el Alcobendas es un equipo de mucho potencial, aunque su trayectoria en la liga es irregular. Ellos juegan sin ningún tipo de presión, ya que están fuera de los puestos de ascenso y eso los hace todavía más peligrosos", dice el entrenador académico, Quique Domínguez.

En la expedición del Octavio, que está concentrada desde la noche de ayer en un hotel de Alcobendas, no hay novedades de última hora y Domínguez podrá disponer de los catorce jugadores que se ha llevado para este choque y que son los siguientes: Martinovic y Llamazares (porteros); Infestas, Celes, Fran, Toth, Paco, Macías, Richard (primera línea); Edu, Cerillo, Mendoza, Crevatin y Bozse (segunda línea).

El equipo, además, no estará solo. Medio centenar de seguidores del Octavio se ubicarán en las gradas del Severo Ochoa para alentar al equipo en esta importante cita. La directiva viguesa ha fletado un autobús de forma gratuita y que parte a primera hora de la mañana de hoy con destino a la capital del estado.

Lugar y hora: Severo Ochoa. 18.00 (hoy).

ÁRBITROS: Bañuelos y Barrena (Euskadi).