El Madrid se estrella en Riazor

Javier Villanueva / a coruña

DEPORTIVO 3 - REAL MADRID 1

Deportivo

Molina; Manuel Pablo, Coloccini (César, m.73), Juanma, Capdevila; De Guzmán, Duscher, Scaloni, Munitis; Valerón (Sergio, m.87) y Tristán (Rubén, m.77).

Real Madrid

Casillas; Diogo, Woodgate, Sergio Ramos, Roberto Carlos; Beckham (Balboa, m.53), Helguera, Pablo García (Soldado, m.66), Guti; Raúl y Robinho.

GOLES: 1-0, m.35: De Guzmán. 2-0, m.45: Juanma. 3-0, m.84: Juanma. 3-1, m.86: Raúl.

ÁRBITRO: Fernández Borbalán (Comité andaluz). Mostró tarjeta amarilla a Capdevila (m.33), Duscher (m.52), César (m.75) por el Deportivo de La Coruña; y a Diogo (m.31), Roberto Carlos (m.61), Helguera (m.70) por el Real Madrid.

INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la undécima jornada de Primera División disputado en el estadio de Riazor ante unos 33.000 espectadores.

El Real Madrid volvió naufragar, como ya es costumbre, en su visita a Riazor, donde no vence desde hace catorce años, y cayó por 3-0 ante el Deportivo en un encuentro en el que los madrileños evidenciaron alarmantes carencias en todas las facetas de juego. Apenas diez días después de la visita a Riazor del Barcelona, parece imposible no comparar la actuación del Madrid con la del conjunto azulgrana, una comparación en la que los jugadores del brasileño Luxemburgo salieron perdiendo, al margen de resultados, punto por punto.

Con un comportamiento lamentable a nadie le extrañó que el conjunto madridista se marchara al descanso por debajo en el marcador, gracias, primero, a un zurdazo del canadiense Julián De Guzmán, uno de los jugadores menos dotados sobre el campo, que puso el 1-0 a los treinta y cinco minutos de juego.

Y, posteriormente, a un cabezazo del central Juanma, que completamente solo, en un claro despiste defensivo, puso el 2-0 a los cuarenta y cinco minutos, a salida de un saque de esquina botado por Pedro Munitis.

Por contra, el Real Madrid apenas si fue capaz de acercarse, y menos con peligro, a la meta de Molina, salvo en una internada de Robinho que se perdió en sus particulares pedaladas ante de rematar el balón mansamente a las manos de Molina.

Con un banquillo de circunstancias, plagado de canteranos ante las ausencias de Ronaldo, Baptista, Zidane o Michel Salgado, el Real Madrid se vio obligado a encomendarse en la reanudación a los mismos hombres.

Así, el conjunto de Luxemburgo se vio condenado a seguir sufriendo infinitos problemas para sacar jugado el balón, mientras que se convertía casi en una quimera la conexión con los delanteros, ante un Deportivo cada vez más envalentonado por el marcador, que adelantó todavía un poco más la línea de presión. Juanma, que enmendó todas las dudas que había levantado, en especial ante el Barcelona, con un segundo tanto, el tercero de los gallegos, en un nuevo regalo de la defensa blanca. Pero es que este Real Madrid parece carente de cualquier espíritu de superación, al menos hasta que regrese el añorado Ronaldo. Raúl maquilló el resultado.