De pruebas en el desierto

Antonio Piñeiro ya cuenta los días que faltan para que comience su nuevo reto. Este mecánico vigués, que también imparte cursos en la Universidade de Vigo, vivirá de primera mano el rally Lisboa-Dakar con la empresa Tibau Racing, encargada de asistir durante toda la competición al equipo Mitsubishi Ralliart. Piñeiro, que será el asistente electrónico, ya lleva haciéndose a la idea varias semanas, pero es ahora cuando entra de lleno en el mundo de las carreras. El miércoles viajará a Argelia con el resto de sus compañeros para probar los neumáticos en los Mitsubishi y ensayar algunas técnicas "secretas" en los vehículos que tomarán la salida.

A pesar de que todavía faltan más de dos meses para dar la salida a la edición de 2006, Piñeiro ya se ha reunido en varias ocasiones con el resto de los 80 integrantes. La primera fue en la pasada Baja Aragón. El vigués se desplazó hasta Zaragoza y allí tuvo su primera toma de contacto con el Tibau Racing. Más tarde, el equipo también hizo unas pruebas en Almería, donde se llevaron a cabo mejoras en las suspensiones de los coches.

Pero será dentro de unos días cuando el mecánico se vea inmerso en el escenario más duro de la prueba. "Nos vamos una semana a Argelia para probar los neumáticos, algunas novedades que queremos introducir y también ensayaremos con los sistemas de navegación", comenta Piñeiro.

Acoplamiento

La juntanza en la duna de Merzuga, a pocos kilómetros de la frontera con Marruecos, servirá también para un mayor acoplamiento de los trabajadores del equipo. "Estas pruebas también sirven para que nos conozcamos mejor, no podemos llegar a Lisboa el 1 de enero sin apenas saber quiénes somos", explica.