Robinho, fuera de la ecuación

El Real Madrid buscará ante el Real Mallorca su tercer triunfo consecutivo en Liga para asaltar la zona más alta de la clasificación, con cambios en su equipo titular que supondrán la permanencia en el banquillo del brasileño Robinho y la titularidad del británico Jonatahan Woodgate.

Una semana de buenos resultados acabó con los debates del juego del Real Madrid y los sistemas de Vanderlei Luxemburgo. Los triunfos en Liga ante Athletic y Alavés, más el logrado en Liga de Campeones frente al Olympiakos, asientan a un Real Madrid que ha ido creciendo en su rendimiento y corrigiendo fallos.

Además, Luxemburgo está de enhorabuena porque tiene a todos sus futbolistas disponibles. Afronta un comedero de cabeza para formar un equipo titular y lo resuelve con una sorpresa, la entrada de Woodgate en lugar de Sergio Ramos, y concediendo la suplencia a Robinho, a quien admite que le falta una base física.

Será un banquillo de lujo el que se verá en el Bernabéu. Plaza asegurada en él tendrá Zidane que, una vez recuperado de la rotura muscular y la pubalgia que sufrió hace un mes, volverá a jugar minutos en la segunda parte.

El Mallorca intentará aplicarse más en defensa para no cometer los errores del último partido (1-4 ante el Málaga) que su técnico, Héctor Cúper, califica de "groseros". Es probable que realice varios cambios en la alineación con respecto a la que jugó ante el Málaga. Choutos, el canterano Tuni y el defensa David Cortés podrían tener su oportunidad. El gallego Borja Fernández no podrá jugar ante el Real Madrid porque una cláusula de su contrato de su cesión lo impide.