El delantero del Celta Fabián Canobbio protagonizó el susto de la jornada. Tuvo que retirarse retiró del terreno de juego cuando apenas habían transcurrido tres minutos de la segunda parte como consecuencia de un esguince en el tobillo.

El uruguayo se lesionó en los prolegómenos del partido contra el Ourense pero Fernando Vázquez decidió que realizase una prueba en el segundo tiempo. El técnico lo colocó en la banda izquierda por delante de Placente pero las sensaciones fueron negativas -con el agravante de las condiciones irregulares del terreno de juego- y el céltico se fue al vestuario para evitar que empeorase el estado de su articulación. Toni Moral tuvo que salir en su lugar. Los problemas de Canobbio fueron la nota discordante de un partido noble que apenas contó con lances bruscos.