Mireia Oriol, una Nevenka sin método

Mireia Oriol (Argentona, 1996) tenía solo cuatro años cuando España ardía con el caso Nevenka, que acabó con un veredicto histórico: era la primera vez que se condenaba a un político por acoso sexual. El popular Ismael Álvarez, alcalde de Ponferrada, fue declarado culpable de acosar a la concejala Nevenka Fernández, pero aún así cuando la actriz, más de dos décadas después y sin recuerdo alguno de los telediarios de la época, comenzó a preguntar mientras se documentaba para protagonizar ‘Soy Nevenka’, en los cines desde este viernes, hubo quien le resumió el asunto como una “trifulca amorosa” en la que ella era la trepa. Mireia Oriol, que se ha autodefinido como la típica empollona que se enfadaba cuando sacaba un 9,5, siguió preguntando, leyó el libro de Juan José Millás, vio el documental de 2021 de Ana Pastor, y viajó a Dublín a conocer a Nevenka, que tuvo que rehacer su vida en el extranjero. Contravino así la opinión de Icíar Bollaín, directora de la película, quien le animaba a construir el personaje desde cero. Cuando, ya empezado el rodaje, Mireia Oriol intentó tirar del método que le habían enseñado en un curso de interpretación en Londres, sí que vio la necesidad de hacer caso a la directora: "Tía, tienes que aprender a hacerlo desde otro sitio”. Ponerse en la piel de Nevenka despertaba en ella un temor atávico en las mujeres: ser acosada, ser violada.

Mientras interpretaba a Nevenka, sufrió un brote de acné. La maquilladora se ofreció a taparlo, pero al final decidieron incorporarlo como un elemento físico del deterioro del personaje. Al fin y al cabo no hubo maquillaje que bastara a la Nevenka real, una coqueta joven de apenas 25 años cuando fue nombrada concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Ponferrada, de ojeras crecientes y peso menguante según se intensificaba el acoso. No era la primera vez que Mireia Oriol somatizaba con un personaje. Tras protagonizar la serie de Netflix ‘Alma’, donde daba vida a una chica que perdía la memoria tras un accidente donde morían muchos de sus compañeros de clase, se le despertó un trastorno de ansiedad. “Mi autoexigencia no me ha dejado ser suficientemente feliz”, le confesó a Eloi Vila en ‘Al cotxe’, de 3Cat. Con los años ha aprendido a mantenerla a raya, no solo con terapia: el trabajo no es lo primero y en cualquier caso tampoco es médico y no va a matar a nadie de un error interpretativo, se obliga a recordar. Cuando la ansiedad asoma la cabeza, se refugia con los amigos en la montaña.

Mireia Oriol, que promociona Nevenka con un 'look' vintage a base de prendas de Prada y Chanel, antes que actriz fue modelo, como se nota en cualquiera de sus fotografías. Durante esos años en París rozó un trastorno de conducta alimentaria y sacó la inspiración para un proyecto, que espera materializar en película, sobre su experiencia en una industria basada en la estética, donde mujeres muy jóvenes se ponen al límite para satisfacer las expectativas. Luego se trasladó a Londres para formarse como actriz y debutó en el cine con Belén Rueda en ‘El pacto’ en 2018. Fue en Catalunya donde comprendió que su carrera de actriz iba en serio gracias a ‘Les de l’hoquei’, serie de la televisión pública. Y bien encaminada, según se vio cuando dos años después Estrella Damm la eligió para protagonizar su anuncio de verano junto a Mario Casas.

Antes de superar el casting de Nevenka, estuvo a punto de tirar la toalla como actriz. Le abrumaba tanta inestabilidad pasados los treinta, ha contado. Luego recibió la llamada de Icíar Bollaín. Porque la vida, para bien y para mal, nunca respeta tus planes.

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