El poeta, director del Instituto Cervantes y viudo de Almudena Grandes, Luis García Montero, ha reconocido este miércoles que en el entierro de la escritora madrileña, el pasado 29 de noviembre, sí echó en falta al Ayuntamiento de Madrid "como institución" y considera que "no se comportan bien los que mezclan la mezquindad política con la institución".

Así lo ha trasladado en una entrevista en la 'Cadena Ser', donde ha manifestado que "la despedida de Almudena será memorable" y que ese día no echó a nadie en falta en el cementerio civil de la capital porque "había mucha gente que fue a recordarla, a cantar la Internacional, o a rezar un Padrenuestro, con muchos amigos del mundo de la cultura, la música y el cine".

Almudena Grandes fallecía el pasado 27 de noviembre en la capital a los 61 años víctima de un cáncer. Ni la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ni el regidor de la capital, José Luis Martínez-Almeida, trasladaron en Twitter sus condolencias a la familia ni acudieron al entierro en el cementerio civil.

García Montero ha puesto en valor que sí hubo "una representación política muy importante", al estar presente en el entierro el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, o la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. "Como estaba acompañado de amigos, no eché en falta a nadie. Luego, con las polémicas de la prensa, noté que había habido ausencias", ha lamentado.

En este sentido, ha echado en falta "conciencia democrática" para saber distinguir que " una cosa es la institución y otra el debate político", algo que él ha aprendido durante su cargo como director del Instituto Cervantes.

El Pleno del Ayuntamiento de Madrid aprobó dar una calle a la autora de 'Los aires difíciles' y rendirle un homenaje público, sin embargo PP, Cs y Vox rechazaron su nombramiento como Hija Predilecta de Madrid. Este llegará tras el acuerdo entre el Gobierno municipal (PP-Cs) y Recupera Madrid para aprobar los Presupuestos de la ciudad para 2022.

"Almudena nunca pidió anda y reconoció con cariño todos los reconocimientos. Si la nombran hija predilecta, no va a ser un enjuague de partido, será el Ayuntamiento, y en este caso, bienvenido sea. Después los juegos políticos de cada cual no tienen sentido ninguno", ha finalizado.