'La diosa Juno', del pintor granadino Alonso Cano, se ha incorporado a la colección del Museo del Prado, un cuadro que la pinacoteca ha adquirido por 270.000 euros y que se trata de una "rareza" en la obra del barroco español por el tema mitológico que representa.

Andrés Úbeda, director adjunto de Conservación del Museo del Prado, y Javier Portús, jefe de Conservación de Pintura Española hasta 1700, han presentado este martes este cuadro de uno de los más grandes artistas españoles del Siglo de Oro que se suma a la colección de Alonso Cano que custodia la pinacoteca, compuesta por 19 pinturas y más de 30 dibujos.

La obra, que se encontraba en una colección privada española, ha sido adquirida tras dos años de negociaciones. El cuadro fue descubierto en los años 90 cuando fue identificado como una 'Pallas' que había sido citado en 1657 en el inventario de bienes de Margarita Cajés, hija del pintor Eugenio Cajés, a cuyo viudo lo compró Juan Antonio Frías y Escalante, seguidor de Alonso Cano. Tanto este hecho como su temática y sus características de estilo sitúan la obra entre 1638 y 1652, fechas en las que el autor estaba en Madrid colaborando en la decoración del Alcázar.

Úbeda ha destacado en una rueda de prensa en la que se ha presentado la obra cómo a pesar de la pandemia, "los inconvenientes y las desgracias" que se han vivido, el Museo del Prado ha querido "mantener su ADN" y ha seguido pendiente del mercado del arte, de las colecciones privadas y los anticuarios de tal forma que han podido realizar esta adquisición, que tiene una "larga" historia.

Así, ha relatado cómo tras tenerse conocimiento de la existencia de este cuadro en una colección privada española, se obtuvo un contacto para acceder a unos propietarios "inciertos" hasta que se produjo el "milagro" de acceder a la familia que lo tenía. Y tras dos años de negociaciones se llegó al "feliz acuerdo" de tal forma que "La diosa Juno" es ya de todos los españoles, ha dicho.

Un cuadro que, según ha contado Portús, fue desconocido hasta que en los años 90 un antiguo responsable del Prado vio una foto en blanco y negro de la obra y sus características le permitieron atribuirla a Alonso Cano. Y fue dada a conocer en un congreso en 1997. La obra se ha identificado con un cuadro que en agosto de 1657 se cita como 'Pallas' en el inventario de los bienes de Margarita Cajés, a la muerte de su padre, el pintor Eugenio Cajés. Allí se atribuye a Alonso Cano con unas medidas de coinciden con 'La diosa Juno'. En 1665 vuelve a aparecer en la almoneda del viudo de Margarita, donde la compra el pintor Juan Antonio de Frías y Escalante, que al parecer se inspiró en esta obra para su 'San José con el Niño', que se encuentra en el Museo de Bellas Artes de Asturias.

El cuadro representa a la diosa Juno, relacionada directamente con la riqueza y la belleza pero también con la maternidad, como demuestra el hecho de que se represente con un pecho descubierto, ha indicado Portús.

La obra expresa los valores plásticos de Alonso Cano (1601-1667), uno de los más grandes artistas españoles del siglo de Oro, así como su sentido del dibujo y el gran dominio de la composición, ha agregado el experto. Alonso Cano fue único entre los artistas españoles del siglo XVII ya que fue ante todo dibujante y diseñador, aunque igualmente exitoso como arquitecto, escultor y pintor.

Pero sobre todo, la importancia de esta obra radica en su temática: en la época abundaba la obra mitológica en España pero solo de pintores procedentes de Italia y Flandes ya que los artistas españoles no la trataban casi, más dedicados a la historia sagrada y a la naturaleza muerta, ha recordado Portús. Tanto la naturaleza mitológica como la exhibición de partes de la anatomía femenina eran poco habituales en la pintura española de la época. Y en el caso de Alonso Cano, sólo alrededor del 4 por ciento de sus dibujos están relacionados con la mitología, ha agregado Portús.

Uno de ellos ha sido elegido para acompañar la presentación al público en el museo de 'La diosa Juno': un dibujo que representa a una mujer recostada y desnuda titulado 'Desnudo femenino', realizado por Cano entre 1645 y 1650, y que, aunque no ha podido ser identificada con seguridad, su expresión corporal puede recordar a la de Dánae, explica el museo.