La descarriada, mujer florero, el objeto de deseo o la santa. Muchos han sido los estereotipos que el arte español ha legitimado y muchas las artistas olvidadas que trabajaron en él. Todas ellas están en "Invitadas", la exposición "más ambiciosa" del Prado para saldar su deuda histórica con las mujeres.

Para el director de la pinacoteca Miguel Falomir esta no es solo la exposición "más ambiciosa" de la pinacoteca sobre las mujeres sino también "la más compleja desde el punto de vista conceptual", con un trabajo de investigación de más de dos años. "Invitadas. Fragmentos sobre mujeres ideología y artes plásticas en España (1833-1931)" ve la luz seis meses después de su programación inicial, por la pandemia del Covid-19 y por ahora, solo podrá ser disfrutada por los madrileños por el cierre de la capital.

"Esta exposición no llega tarde, al revés, llega en el momento en que tenía que llegar y como consecuencia lógica del trabajo del museo desde hace unos años", explicó en declaraciones a Europa Press Miguel Falomir, quien además rechaza las críticas de 'machismo' respecto a la política del museo.

"Siempre se nos acusa de ser un poco machistas, como si fuéramos los únicos, y en este país lo ha sido todo el mundo. Lo que yo puedo decir es que llevo tres años para intentar cambiar eso como director. ¿Hay algún otro museo que pueda decir que en tres años se hayan hecho tantas cosas (en relación a la mujer)?", preguntó.

La propuesta de la exposición permanecerá en el museo hasta marzo de 2021. Las 130 obras que la integran son casi todos de fondos de la pinacoteca, que solo tiene medio centenar de pintoras y casi cinco mil autores hombres. La mayoría fueron adquiridas como premios en las exposiciones nacionales de bellas artes de la época, y luego pasaron a engrosar la colección del Prado.

"No se trata de una bienal sobre pintoras, ni de arquetipos. Se trata de dar visibilidad a las pintoras del siglo XIX y primeras décadas del XX y explicar el molde patriarcal al que tuvieron que hacer frente", explicaba el comisario de la muestra, conservador del Área de pintura del siglo XIX, Carlos G. Navarro, durante su presentación.

El recorrido se estructura en dos partes, una con obras firmadas por hombres y en los que la mujer ocupa un papel subsidiario, y un segundo bloque que muestra a una serie de autoras de la época, en muchas ocasiones por primera vez y completamente desconocidas para el gran público.

Obras de José Belliure y Gil, Mateo Inurria, Ignacio Zuloaga o Raimundo de Madrazo comparten protagonismo con desconocidas pintoras como Maria Roësset Mosquera, Flora López Castrillo, Aurelia Navarro Moreno, Jane Clifford -una de las primeras fotógrafas-, la copista Emilia Carmena de Prota o Concepción de Figuera Martínez-Güertero, que firmaba como Luis Lármig. También hay varios cuadros de reinas que fueron pintoras como Isabel II, que cuenta en la muestra con una copia de la "Sagrada familia del pajarito" de Murillo, y de pintoras de bodegones y miniaturas, dos de únicos géneros en las que muchas mujeres pudieron desarrollar su carrera. La pinacoteca ha hecho un gran esfuerzo de restauración, se han restaurado 40 cuadros, y algunos de ellos formarán parte de la reordenación que el museo prepara sobre la colección del siglo XIX, prometió Falomir.