Cientos de vigueses cumplieron ayer con el ritual navideño de ver en directo a Tony Lomba y Elio dos Santos. Como tomar las uvas en Fin de Año o asistir a la cena con los amigos, ver a esta pareja de hecho irreconciliable se ha convertido para muchos en una costumbre ineludible entre la Navidad y la Nochevieja. La Fábrica de Chocolate volvió a llenarse de seguidores, veteranos en su gran mayoría, del dúo vigués.

Germán Fandiño cumplió con lo prometido y lució la camisa blanca con chorreras que utilizó con Los Tres Sudamaricones hace ya un cuarto de siglo. Pero tras el inicio del concierto, en el que sonó la nueva canción “Peppermint” (originalmente titulada “Al alba”), Lomba decidió cambiarse sobre el escenario y ponerse una camiseta con el lema “Dios salve a la música ligera”, y colocarse una ristra de luces LED al cuello. Todo muy navideño.

Y entre la música ligera y la ironía de Tony Lomba fue discurriendo el concierto, en el que convivieron el amor de “La abuela” y el pornopop de “Mamada”; demostraciones de poderío vocal flamenco y bases programadas (por cortesía del líder de los Seres Queridos) que combinaron The Prodigy con Camela en la espídica “Me la meto toda”. La voz medio rota de Fandiño (qué carrera hubiera hecho en Italia cantando temas del estilo de “Sujeto y predicado”) llenaba la sala gracias a su potencia natural, ayudada por toneladas de “reverb” y brillantemente respaldada por el teclado y la cristalina guitarra de 12 cuerdas de Eladio Santos.

Tras “Insincero”, “Mi carro salvaje” y “Vaya tío”, sarcástico homenaje a Abel Caballero, el clímax del concierto llegó con “Alfredo Landa” y la irónicamente patriótica “España España bandera bandera” (“antes era broma”, comentó Elio dos Santos).

La última canción, “Hoy es un día especial”, es otro de los himnos del dúo (al igual que “Me la meto toda”) que tiene ya 22 años, los mismos que han pasado desde el álbum “Pareja de hecho”, de 1997.

Faltaron Bunbury y Leticia Sabater, protagonistas de dos de las canciones más impúdicas del repertorio “lombiano”. “Se han vuelto ‘mainstream’, lo que yo te diga”, comentaba al final del concierto uno de sus seguidores más fieles, que sin embargo lleva lustros sin faltar a la cita anual en La Fábrica de Chocolate. Este sábado 28 (misma hora, 22.00, mismo lugar) Tony Lomba y Elio dos Santos tendrán una nueva oportunidad para demostrar que no se han vendido, aunque lo vendan todo (el papel). Un respetito.