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Haydée Milanés canta a su padre

La cantante cubana actúa por primera vez en Galicia para presentar 'Amor', un disco de versiones de su progenitor

// Xoán Álvarez

Debuta sobre las tablas gallegas, un par de apariciones televisivas al margen, Haydée Milanés, que actuará este jueves en la Sala Capitol compostelana y el viernes en La Room de Ferrol. Lo hará presentando la edición deluxe de 'Amor', el álbum doble con el que ha ahondado en las canciones que la formaron "musical y espiritualmente". Piezas que escribió su propio padre, Pablo Milanés, y que le acompañaron desde que era una niña. En el primer disco canta a dúo con él, en el segundo lo hace con otros grandes nombres de Latinoamérica y de España: Omara Portuondo, Fito Páez, Francisco Céspedes, Julieta Venegas, Joaquín Sabina o Silvia Pérez Cruz, por citar un puñado. Se declara "muy contenta de estar en Galicia", una tierra a la que el fundador de la Nueva Trova está muy vinculado, puesto que de aquí es su actual esposa y en Vigo nacieron sus hijos más recientes.

Unas dos décadas de carrera ha tardado Haydée (La Habana, 1980) en enfrentarse al cancionero de su progenitor a nivel profesional. "Empezar a caminar con esa figura tan fuerte fue difícil, pero trabajé mucho y poco a poco una va teniendo su espacio, va encontrando cosas que decir y maneras de expresarse", comenta. Hasta que ese poso de angustia se convirtió en "ilusión" por compartir la música con "un artista y una persona maravillosa". Así que cuando en 2017, 13 años después de su primer disco, decidió grabar este trabajo lo hizo con tres objetivos: "reverenciar" la obra de uno de los autores más importantes de la música cubana en las últimas décadas, difundirla entre las generaciones más jóvenes y, simplemente, darse el gusto de hacerlo.

Reivindicar la tradición

Haydée Milanés ha dedicado su carrera a investigar y actualizar la rica tradición musical cubana, más allá del cliché turístico. Géneros como el son, el bolero o la canción forman parte de su repertorio, ya sea en versiones de otros autores o en composiciones propias. Una elección que huye de los ritmos latinos que hoy tienen más éxito, como el reguetón. "Pienso que la responsabilidad está en los propios artistas y en los medios de difusión. La gente escucha lo que los artistas hacen y lo que los medios difunden", analiza sobre el auge de ese género en detrimento de otros. "Para mí es muy importante reconocer las raíces de uno, en mi caso la música cubana".

La cantante y compositora también se aleja del estereotipo de mujer sensual caribeña, que quizás le hubiese abierto más puertas a nivel comercial: "Sencillamente he sido yo misma. En muchas ocasiones me han sugerido que me comporte de otra manera, pero mi elección ha sido tener una proyección propia".

Desde La Habana, donde no ha dejado de residir, Haydée permanece al tanto de la explosión feminista en Europa y Estados Unidos. "Tenemos muchísimas cosas que hacer, no solo en Cuba, en el mundo entero. Sigue habiendo problemas de machismo que no están resueltos. Todos tenemos que pensar en este tema, sin ser extremistas o agresivos, simplemente buscando la equidad. Somos diferentes los hombres y los mujeres, pero sí es importante que los derechos sean los mismos", reflexiona.

La artista no rehuye ninguna cuestión, tampoco la de la situación política y social en su país. La llegada de Donald Trump al Despacho Oval, comenta, ha supuesto un endurecimiento del bloqueo a la isla, "y eso es indiscutiblemente negativo". "Pero hay muchísimos bloqueos internos, muchísimos problemas que están separados del conflicto con Estados Unidos. No está bien Cuba en estos momentos, estamos necesitando un cambio". Y sin embargo, no ha renunciado a vivir allí. "Es mi país, una siempre trata de quedarse en su país, hacer las cosas allí. Hasta que se pueda, ¿no?".

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