"Anónimas. Retratos de musas cotidianas", de Gemma Marqués (Burgos, 1981) son treinta y seis páginas a todo color sobre papel reciclado con acuarelas inspiradas en mujeres cotidianas y surcadas por el texto feminista de Lola Costas. Una aventura editorial -en castellano y gallego- que ya va por la segunda edición y que recala este sábado en Vigo. La autora protagoniza un acto con entrada libre en Detrás do Marco (20.00 horas) en el que se venderán y firmarán libros, además de abrirse una exposición de acuarelas con luces led.

El proyecto de "Anónimas" lleva ya una singladura que transcurrió por la Casa Taller -un punto de interés creativo en el frontal marítimo de A Guarda- y también por Pontevedra, Allariz (Ourense) y prevé llevarlo a Tui y Santiago. Su proyecto se ha hecho público -y notorio- también con las pinturas en murales urbanos en el concello de Tomiño. La reacción de los vecinos está retroalimentando a la autora. La artista espera que las pinturas se expandan próximamente a más concellos.

Mientras espera, y como no para, ha dado un curso universitario sobre mujeres artistas. Gemma Marqués pone el foco en "Anónimas" en las protagonistas de trabajos invisibilizados que, sin embargo, dotan de sentido el día a día y el futuro colectivo.

"Es un homenaje a las mujeres corrientes, trabajadoras que muchas veces están en la sombra. Madres, hijas o hermanas", reconoce. "Anónimas" se ha inspirado precisamente en eso: en féminas de todos los días.

El trabajo que mañana presenta en Vigo es el primer libro de acuarelas que publica esta retratista gallega de adopción, que confiesa: "Están inspiradas en mujeres de carne y hueso. Hay muchas gallegas, una holandesa, una parisina..." las modelos proceden de diversos universos que coexistieron con la artista, aunque esta reconoce que "fueron surgiendo poco a poco".