El Eilis Dillon Bisto Award es el premio que en Irlanda se otorga a los mejores libros del año. La irlandesa Grace Wells lo consiguió en 2012 con su obra Gyrfalcon en literatura infantil. Dicho libro también logró la distinción de la Biblioteca de Munich White Ravens, concedida cada año a los mejores libros infantiles del mundo. En su carrera, también alberga algunos de los mejores galardones de poesía de su país. Poemaria, el colectivo poético que llenó de lírica el Casco Vello este verano en un festival internacional, ha invitado a Wells a Vigo este fin de semana en un intercambio bajo el título de La Malinche Readings. Este viernes impartió una charla en la Facultade de Filoloxía e Tradución de la Universidade de Vigo así como un recital en Librouro. Su travesía prosigue con un peculiar taller de escritura entre la playa de Samil y la Fundación Sales, con picnic incluido. En una entrevista concedida a FARO habla de consejos para escribir poesía, qué supone este arte para ella y la situación de su profesión en Irlanda.

-¿Cuáles son los principales consejos para la gente que quiere escribir poesía?

-El principal consejo que doy es que lo haga. Hay mucha gente que quiere hacerlo pero se frena a sí misma. Cuando imparto un taller de escritura, me gusta llevar a la gente a la naturaleza: playa, montaña o bosque. La creatividad se encuentra en cualquier sitio de la naturaleza. Me parece bonito llevar el taller al mundo en lugar de sentarnos alrededor del escritorio. Cuando estás en la playa o el bosque, lo que está enfrente tuya puede ayudarte a crear poesía porque puedes describir a qué huele, qué oyes, cómo son los pájaros? Puedes dar todos los detalles de lo que ves y meterlo en tus poemas.

-En un artículo suyo, usted recomienda imprimir el poema final y llevarlo por toda la casa para declamarlo en alto una y otra vez, para que salga de la boca y pulmones. Pero, ¿de dónde proceden los poemas?

-Es una buena pregunta. En primer lugar, se escribe porque se quiere contar algo, se quiere echar algo fuera. De eso, hablé en mi charla en la Universidade de Vigo. Tiene que ver con la expresión de las fuerzas creativas que hay en la vida.

-Una vez, una persona le dijo que "toda poesía es una autobiografía espiritual". ¿Coincide?

-Definitivamente, es cierto. En Reino Unido e Irlanda, quizás también sucede aquí, hay antiguas piedras con marcas que señalan las millas de la carretera y que te dicen cuánto te falta en el camino. Un poema es algo así. Llegas a un punto y te indica cuánto te falta y sigues escribiendo. Haces otra pieza y es como si fuera un indicador del camino.

-¿Realmente para escribir hay que correr riesgos?

-Sí, siempre. La vida del escritor es una vida de riesgos porque no ganas dinero como una persona que tiene un empleo común. Toda tu vida es una vida de riesgos. Al final del día, puede que acabes con la página en blanco, sin nada bueno escrito en ella. También está el riesgo de contar una verdad que piensas que la gente no quiere oír.

-La soledad, ¿es el fin principal de sus libros?

-No es el principal pero sí está entre los más importantes. No obstante, soy afortunada porque Irlanda tiene una gran comunidad de escritores. No vivimos cerca unos de otros pero, cuando nos vemos unas pocas veces al año, nos damos apoyo.

-¿Cuál es la salud de la poesía en Irlanda?

-Mucha gente escribe pero no tanta compra libros de poesía. Así que es saludable en cuanto a la cantidad de gente que escribe pero al no haber mucha gente que lea no es saludable en ese punto. Es difícil publicar poesía.

-¿Qué significa la poesía para usted?

-Es una forma de expresión del alma. Si llegas a casa tras un mal día, puedes escribir y expresar algo del alma.