El primer contacto con la diversidad

Bien sea en el colegio o en la propia familia, con amigos o jugando en el parque, en algún momento los niños y niñas entrarán por primera vez en contacto con personas con algún tipo de discapacidad y es normal que les surjan peguntas. Con el fin de explicarles la situación con la mayor naturalidad posible, y aprovechando esta curiosidad infantil para promover la empatía, la inclusión y la igualdad, las concejalías de Política Social y Educación, en colaboración con Cogami, organizan el taller de sensibilización «Comunica-sons» en los colegios de Mos.

La iniciativa se va a impartir en todos los colegios de Mos y está dirigida a los alumnos y alumnas de Educación Infantil. La encargada de impartir el taller será la técnica de Educación, Marcia Vásconez, en colaboración con las personas trabajadoras y voluntarias con discapacidad de Cogami.

El alumnado del segundo ciclo de Infantil es el beneficiario de esta actividad, que se desarrollará durante sesiones de 45 minutos, aproximadamente, en las que se realizará una aproximación a los conceptos de discapacidad y diversidad a través de un juego musicalizado.

«Una sociedad no puede prescindir del conocimiento del 10% de la población»

Así, los niños y niñas aprenderán las notas musicales relacionando cada nota con un tipo de discapacidad que cualquier persona pueda tener. Además, se realizará la proyección de dos cortos de animación infantil en relación a la discapacidad, barreras y accesibilidad.

El alumnado del CEIP de Petelos fue el primero en recibir esta formación especial, y contó con la visita de la alcaldesa, Nidia Arévalo, y la concejala de Política Social, Sara Cebreiro. Según explicaron las representantes municipales, los objetivos de dicha iniciativa son «despertar la curiosidad y el interés del alumnado de infantil por la diversidad, entender la diversidad como un valor positivo, conocer la discapacidad desde sus diferentes tipos y dimensiones y mostrar estrategias y recursos didácticos de apoyo al equipo docente para poder usar con el alumnado de Educación Infantil».

Para todo ello se utiliza una metodología lúdico-didáctica y, al tratarse de un juego, se fomenta la interacción y participación del alumnado. Además, la presencia de personas voluntarias con discapacidad aporta calidad y realismo a la actividad.