PP y BNG de Mos unen sus fuerzas contra el nuevo trazado de la A-52

La corporación municipal de Mos celebró ayer el último pleno del año mostrando su rechazo al proyecto del nuevo trazado que conectará la A-52 con Vigo a través de un túnel de 4 kilómetros que recorrerá la parroquia de Sanguiñeda, en Mos. A través de una moción urgente, PP y BNG dejaron de lado sus discrepancias políticas votando a favor de esta moción que exige al Gobierno central la paralización inmediata del proyecto. No pasó lo mismo con el PSOE, que votó en contra justificando que «el proyecto es modificable».

La alcaldesa, Nidia Arévalo, explicó la moción y adelantó que el Concello pondrá todos sus recursos a disposición de los vecinos y vecinas y redactará un modelo de alegación tipo para que se firme masivamente. Además, con la aprobación de esta moción, además de reclamar la paralización inmediata de un proyecto que calificó de «agresivo y perjudicial para Mos», también se pide que se libere el peaje de la AP-9 para desviar el tráfico de la A-55; y se insta a la Xunta de Galicia para que elabore un documento que rechace este trazado y medie con el Ministerio de Transportes. «Queríamos que fuera una moción de toda la corporación, pero me da mucha pena que el PSOE vote en contra», apuntó Arévalo.

«Urbanísticamente es un proyecto muy nocivo para Mos», valoró el portavoz del PP en la corporación, indicando que no respeta el PXOM y afecta de manera directa a un centenar de familias y a cinco suelos urbanizables en Sanguiñeda.

A la medida de Vigo

En la misma línea se pronunció el BNG, insistiendo en que «es un proyecto claramente perjudicial para este Concello». Su portavoz, Gustavo Barcia, también hizo hincapié en que este «está hecho a la medida del futuro PXOM de Vigo», y, en este sentido, denunció que el Ministerio de Transportes no se reunió ni con el gobierno local ni con los vecinos de Mos durante la fase de redacción. «Es indignante», acusó Barcia, reafirmado por Arévalo.

Por su parte, el PSOE justificó su voto en contra acusando al gobierno local de tergiversar las cosas. «Huele a que lo único que están haciendo es confrontación política», indicó el socialista Alejandro Figueroa, animando en trabajar en alternativas para modificar el actual proyecto, que está en fase de exposición pública, algo que, según dijo, ya es un periodo para escuchar a los vecinos.

El posicionamiento en contra del PSOE fue criticado por PP y BNG. De hecho, la alcaldesa lo calificó como «una traición al municipio» y adelantó que no contarán con el PSOE en las comisiones de seguimiento que se realicen alrededor de esta problemática que deberá ser encabezada por la plataforma vecinal DefendeMos. «Vamos a ir a donde sea necesario, con los vecinos por delante y nosotros a su lado», concluyó Arévalo, definiendo este proyecto de enlace de la A-52 con Vigo como «el mayor atropello para Mos».