Prisión para el detenido en Baiona por el crimen machista de Estela Blach
Está investigado por un delito de homicidio o asesinato, a determinar a lo largo de la instrucción, y por otro de quebrantamiento de medida cautelar, ya que tenía una orden de alejamiento de la víctima desde abril por violencia de género
Se acogió a su derecho a no declarar

Llegada a la Ciudad de la Justicia del detenido por el crimen machista de Baiona, esta mañana. / Adrián Irago
E. V.
El magistrado del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo ha decretado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del detenido por la muerte de Estela Blach en Baiona. Está investigado por un delito de homicidio o asesinato, a determinar a lo largo de la instrucción, y por otro de quebrantamiento de la medida cautelar de alejamiento de la víctima que tenía en vigor desde el pasado abril por violencia machista.
Humberto González Rodríguez, de 38 años, fue trasladado en la mañana de este viernes a la Ciudad de la Justicia de Vigo para comparecer ante el juez, frente al que se acogió a su derecho a no declarar.
Estela, cuya familia luchaba por apartarla de la relación con Humberto ya que había habido agresiones previas, estaba en el sistema VioGén como víctima de «riesgo medio» a raíz de una denuncia.
Se entregó al no aguantar la «presión» de la búsqueda
Cuando estaba a punto de cumplirse una semana desde su huida, Humberto González Rodríguez, O Grilo, decidió poner fin a su desesperada e improvisada fuga y entregarse. La Guardia Civil arrestó ayer a este vecino de Baiona como presunto autor del crimen de su exnovia Estela Blach Silva, de 36, después de que el hombre, que cuenta en su historial con antecedentes por tráfico de drogas, contactase con su madre pidiéndole que telefonease a la Benemérita porque ya no aguantaba más la «presión» que sentía a causa del dispositivo de búsqueda desplegado en torno a su persona.
A través de su progenitora, trasladó que esperaría a los agentes en un camino cercano a su vivienda en la parroquia de Belesar, la misma donde tuvo lugar el suceso. Cuando llegaron los guardias civiles efectivamente allí estaba. El detenido contó que durante los seis días de huida –desde la madrugada del viernes 8 de noviembre hasta ayer jueves– estuvo oculto en un galpón de esa misma zona sin acceso a comida y, resumieron las fuentes oficiales, en condiciones físicas «bastante duras y difíciles».
Los agentes habrían pedido indicaciones al sospechoso sobre la ubicación del galpón donde se escondió los últimos días. La labor de la Guardia Civil se centraba ayer en localizar este lugar y en ultimar diligencias para poner al presunto homicida a disposición del Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo. No trascendió si Humberto autorizó que le tomen una muestra de ADN, trámite habitual que es clave para cotejarlo con los vestigios recabados en torno al crimen. También es previsible que se analice su ropa, aparentemente la misma que llevaba la noche del homicidio.
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