Varios inmuebles de titularidad municipal de Ponteareas están sufriendo cortes en el suministro eléctrico por impago. Es el caso del Mercado de Abastos y el Centro Social, entre otros, tal y como ya sucedió al final de la anterior legislatura. El gobierno municipal achaca estos cortes de luz “a la gestión económica de la anterior corporación”, que “continúa teniendo consecuencias para los vecinos y vecinas cerca de cuatro meses después de la pérdida de la Alcaldía por parte del bipartito BNG-PSOE”.
Explica el ejecutivo que dirige la popular Nava Castro que “uno de los principales agujeros económicos que dejó en herencia el anterior bipartito es el alumbrado público”, refiriéndose al desfase en la partida dedicada a este gasto; un millón de euros por debajo de lo que cuesta la factura anual de la luz a las arcas municipales. Por este motivo, el gobierno ponteareano convocará un pleno extraordinario urgente para intentar aprobar un Reconocimiento Extrajudicial de Crédito por valor de las cantidades adeudadas pendientes de abonar, que se calculan en 450.000 euros.
Esto se hará en cuanto se tenga una respuesta favorable de la propuesta realizada a la compañía suministradora, y así generar una partida presupuestaria para tal fin, “presumiblemente a través de un préstamo”, explican desde el Concello.
“La partida presupuestaria de 300.000 euros para todo un año destinada al pago de la luz era claramente insuficiente cuando el servicio está valorado en 1,3 millones de euros”, insiste el gobierno local, volviendo a denunciar que “en el momento de llegar a la Alcaldía, el actual grupo de gobierno se encontró con solo 97.000 euros de liquidez entre el 17 de junio y el próximo 31 de diciembre. Una liquidez que no resultó ser tal ya que existen 2,5 millones de euros en facturas impagadas y 9 millones de deuda”.
El equipo de gobierno indica que lleva semanas negociando para revertir esta situación a la mayor brevedad posible y restablecer la normalidad en todos los centros. En este sentido, advierte que centros como residencias, centros de salud o educativos tienen garantizado el suministro eléctrico al ser considerados servicios de primera necesidad.