O Rosal comienza la recuperación de la carretera vieja de San Miguel de Tabagón

Las obras incluyen la rehabilitación del muro tradicional de piedra y servirán para la transformación de espacios de interés patrimonial con concentración residencial

Inicio de las obras de recuperación de la carretera.

Inicio de las obras de recuperación de la carretera. / Carlos Ponce

El Concello de O Rosal ha comenzado las obras de recuperación de la carretera vieja de San Miguel de Tabagón, unos trabajos que transformarán la zona y que servirán de modelo para la rehabilitación de espacios rurales con presencia de elementos con interés paisajístico o patrimonial y un cierto nivel de concentración residencial. Tal y como explica la alcaldesa Ánxela Fernández, los objetivos de estas obras son “mejorar la calidad del entorno de alto valor patrimonial que cuenta con un perfil urbano de carácter singular, al tiempo que se aumenta la seguridad de los recorridos peatonales, haciendo que las calles recuperen de su identidad original”.

Esta primera fase de recuperación empezó a ejecutarse por la zona más deteriorada de la carretera vieja, donde una de las principales acciones es la rehabilitación del muro de contención de piedra que sujete el camino, una solución constructiva que se integrará en el entorno y que resolverá los problemas que presenta el actual muro, que se encuentra en un preocupante avanzado estado de deterioro.

Con estos trabajos, que afectan a un total de 1.536 metros cuadrados, también se renovarán los pavimentos con elementos y materiales que contribuyan a una circulación más calmada del tráfico, dándole prioridad a las personas y creando espacios que fomenten una movilidad más sostenible y saludable. La forma de intervención, de tipo rosario, incluirá una serie de nodos resueltos con materiales nobles principalmente en intersecciones y frente a elementos de especial interés, así como varios ejes en los que se reduce la presencia de asfaltos tradicionales y se incluyen detalles cuidados.

La alcaldesa de O Rosal agradece el compromiso de los vecinos del barrio, que se involucraron de forma muy activa en el proceso de participación social realizado hace unos meses para aportar sugerencias al proyecto de recuperación y que afectaban aspectos como la problemática de las pluviales en esa zona de escorrentía.

Las obras cuentan con un presupuesto de casi 170.000 euros financiados en el marco del Plan Concellos 2022-2023 de la Diputación de Pontevedra.

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