Crimen del pozo de Porriño: la Guardia Civil vincula el móvil con las estafas de la víctima en la compraventa de coches

R. V.

Una compleja investigación que se ha saldado con la detención de cinco personas y la convicción de que el móvil está relacionado con las estafas en el sector de la compraventa de vehículos cometidas supuestamente por la víctima Carlos Alberto V. O., el ciudadano portugués cuyo cuerpo sin vida apareció en un pozo de O Cerquido, en Porriño, en febrero de 2021.

Bautizada como "Profundo 21", la Guardia Civil detalla en una comunicado los pormenores de las pesquisas llevadas a cabo por la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Comandancia de Pontevedra, y dirigida judicialmente por el Juzgado de Instrucción Número 3 de O Porriño. Pesquisas en las que jugó un papel determinante la ciencia forense debido al estado de putrefacción en el que apareció el cadáver de Carlos Alberto en el pozo.

Primero el Departamento de Biología de la Dirección General de la Guardia Civil obtuvo un perfil genético del cuerpo a raíz del húmero y el fémur extraídos durante la autopsia. Pero estos identificadores de ADN, una vez introducidos en la Base de Datos de ADN humano de la Secretaría de Estado de Seguridad, no coincidían con los de ningún otro perfil genético, y es entonces cuando interviene la Unidad de Antropología Forense del Instituto de Medicina Lega de Galicia (Imelga).

A la derecha, entrada al pozo donde apareció el cadáver

A la derecha, entrada al pozo donde apareció el cadáver / Guardia Civil

Esta reputada unidad, con los forenses Fernando Serrulla y Alba Sanín y la colaboración de José Luis Gómez, jefe de Patología Forense del Imelga de Vigo, "realizó una aproximación del rostro de la víctima a partir de sus estructuras óseas faciales". Fue la difusión de este "retrato robot" lo que permitió la identificación del cadáver. Una hermana reconoció al de la imagen como el hermano que llevaba casi tres año desaparecido.

A partir de aquí la investigación se centra en averiguar quién o quiénes cometieron el crimen que acabaron con la vida de Carlos Alberto, de 40 años y con antecedentes policiales, el 13 de octubre de 2018. Según la nota de la Guardia Civil, los agentes "obtuvieron las pruebas necesarias que permitieron identificar a los autores". Se detuvieron a cinco personas en Vigo y Porriño. A tres de ellos se les imputan delitos de homicidio y detención ilegal, por los cuales dos llevan en prisión desde la semana pasada mientras que para el tercero se decretó la libertad provisional con la obligación de comparecer una vez al mes en el juzgado y con la prohibición de viajar al extranjero.

Sobre el móvil, después de estos arrestos, los investigadores ven reforzada esta hipótesis: "De las actuaciones practicadas, se puede concluir que el móvil del Homicidio pudiera estar relacionado con estafas que supuestamente realizaba la víctima en el sector de la compraventa de vehículos".