El paseo peatonal que rodea la península de A Ladeira se ha venido abajo otra vez. El mar ha vuelto a ganar espacio a la tierra hasta el punto de imposibilitar el paso hacia la punta de la playa. Han sido diversas las reparaciones en el mismo punto en los últimos años y han servido de poco. Por eso el Concello de Baiona ha remitido un informe acompañado de reportaje fotográfico a la Jefatura Provincial de Costas para reclamar “una solución definitiva”. Así lo aseguró ayer el alcalde, Carlos Gómez Prado.
“Xa non ten sentido falar de se hai que retirar o camping ou non, senón aportar una solución definitiva”, afirma el alcalde
Hace tan solo dos años de la última intervención en la zona. Los continuos desmoronamientos afectaron al muro que rodea el camping situado en pleno espacio natural y el establecimiento lo reparó. El Concello había restituido un año y medio antes la escollera construida por Costas en 2014, que sufre continuos desprendimientos. El problema acaba repitiéndose sin remedio a causa, según señalan diversos estudios científicos, de la acción humana. La urbanización del entorno, con el camping como elemento central, ha provocado, destacan las investigaciones, cambios en las corrientes que provocan un mayor grado de erosión en la parte central del arenal.
El alcalde urge a Costas que ponga sobre la mesa un proyecto para acabar con el fenómeno. El camping ha logrado legalizar su situación tras años de procesos judiciales y el regidor considera que “xa non ten sentido falar de se hai que retiralo ou non, senón aportar una solución definitiva”. Y es que el tramo supone un peligro para los viandantes que lo frecuentan especialmente en verano. No solo por el hundimiento visible, sino por los agujeros que proliferan a lo largo del sendero.
El Concello urge también la segunda fase del paseo de A Foz, todavía en precario
El de A Ladeira no es el único tema pendiente del Concello con Costas. El organismo estatal reparó hace un año el tramo del paseo de A Foz que permaneció desmoronado cuatro años, pero lo dejó en precario, pendiente de una segunda fase del proyecto para recuperar el espacio. Gómez Prado insiste en la necesidad de afrontar los trabajos “canto antes”.