Los empinados caminos del barrio de Arcade de Riba, en Soutomaior, se transformaron durante la tarde ayer en un circuito para acoger la XVI edición de la Baixada de Carrilanas de Arcade.
La prueba, puntuable para la Copa Galicia de la especialidad, contó con 53 participantes entre las distintas categorías.
El público abarrotó el recorrido para animar a los pilotos en su espectacular descenso.