El cese de la actividad en la fábrica de Aucosa (Auxiliar Conservera S.A), ubicada en el litoral de Cabanas, ha sido acogido con satisfacción entre los residentes del entorno, que ya pueden respirar tranquilos después de aguantar durante años las molestias que causaban los fuertes olores que desprendía esta empresa dedicada a la elaboración de harinas y aceites de pescado. La compañía se encuentra en situación preconcursal y desde finales del pasado mes no se trabaja en sus instalaciones, una situación que ha mejorado la calidad de vida en Chapela, Trasmañó y Cedeira.
Sin embargo, desde la Plataforma en Defensa da Enseada de San Simón y la Asociación de Vecinos de Chapela, aunque celebran este logro para el que llevaban años luchando, advierten del peligro que supone la planta satélite de almacenamiento y gasificación de Gas Natural Licuado (GNL) en caso de que no se realice un control preciso y un mantenimiento adecuado.Así, ambos colectivos sociales han presentado un escrito de denuncia ante el Concello y la Consellería de Medio Ambiente advirtiendo del riesgo que supone esta situación, y exigen que se proceda con la mayor urgencia posible a la inertización del GNL almacenado en la planta y al desgasificado de toda la instalación de la factoría.
Los afectados exponen que “la inactividad de la empresa, y en consecuencia la ausencia de mantenimiento de las instalaciones como la planta satélite de GNL, incrementa extraordinariamente el alto riesgo de accidentes graves”. Y advierten de que, en caso de producirse un siniestro grave en la planta satélite de almacenaje de GNL y gasificación de esta fábrica, “la radiación térmica y la onda expansiva tendrían efectos devastadores en un radio de 200 metros”.
Anulación de la licencia
La Plataforma en Defensa da Enseada de San Simón consiguió a principios de año que el juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 2 de Vigo estimase un recurso presentado por este colectivo por el que se anulaba la licencia concedida por el Concello de Redondela para las obras de ampliación de las instalaciones de Aucosa, al entender la sala que dichas actuaciones no se ajustan a la legalidad urbanística y que las obras agravarían la situación de incompatibilidad con el planeamiento que ya tienen las actuales instalaciones.
Ahora, la situación de preconcurso y paralización de la actividad de la empresa ha causado sorpresa, puesto que el pasado año acometieron una importante reforma en la planta con una inversión de 10 millones de euros –que incluyó una ayuda de 4,7 millones de la Xunta– para modernizar el proceso de producción para eliminar los malos olores.
