Las personas que paseen estos días por la histórica Fortaleza de Valença do Minho, visitada por más de 2 millones de personas cada año —buena parte gallegos— y candidata a Patrimonio de la Humanidad, echarán probablemente en falta uno de sus elementos históricos más llamativos y valiosos. Esta misma semana se han retirado todos. ¿Por qué? Por extraño que pueda parecer, el insólito robo de uno de ellos ha llevado a la Cámara Municipal a salvaguardar el resto. Se trata de uno de los cañones del sigo XVIII que hay en varios puntos de la fortificación. En la madrugada del pasado domingo al lunes desapareció uno de ellos. Una pieza histórica del reinado de D. João V perteneciente al Arsenal Real del Ejército. Según informaciones de medios de comunicación lusos, el cañón pesa en torno a una tonelada. Estaba ubicado en el Baluarte do Socorro, junto a la Pousada de S. Teotónio.

El cañón robado.

Según informan desde la Cámara Municipal de Valença do Minho, la pieza que ha desaparecido se trata de un “magnífico ejemplar de armamento bélico”. Según las primeras investigaciones, todo apunta a que el cañón fue arrojado por la muralla hasta uno de sus niveles intermedios. Desde ahí —explican desde la Cámara Municipal— pudo haber sido de nuevo tirado hacia el foso de la Fortaleza, donde hay ya acceso de vehículos y desde donde los ladrones lo habrían recogido y transportado.

Tras detectar este robo que atenta contra el patrimonio mueble nacional, la Cámara Municipal de Valença dio aviso de inmediato tanto a la Guardia Nacional Republicana (GNR) como a la Policía Judicial. Ambos cuerpos de seguridad ya recabaron pruebas en la zona. Asimismo, se tomó la decisión de retirar de forma provisional el resto de cañones que hay en la Fortaleza de Valença do Miño. El alcalde del municipio fronterizo con Galicia, José Manuel Carpinteira, se mostró “indignado” por este robo, ya que la pieza que fue sustraída —dijo— tiene un “incalculable valor histórico”.

Valença espera poder recuperar este cañón y que la Fortaleza luzca como antes lo antes posible. Pero preocupa que lo sucedido no sea un hecho puntual.