La historia de una parroquia narrada por sus propios protagonistas. Este es el objetivo de un documental impulsado por el Obradoiro de Estudos Locais Fernando Monroy de Cesantes en el que se recoge el conflicto que se vivió en esta parroquia redondelana entre finales de 1955 y principios de 1956 por el intento de acotar la playa para un criadero de ostras. El trabajo audivisual, titulado “Ostras. O Peche do mar”, dirigido por el redondelano Fernando Carreira “Cuchi”, se presentará mañana en la isla de San Simón.
La film narra los acontecimientos de finales de 1955, en plena dictadura franquista, cuando el Instituto de Investigaciones Pesqueras intentó crear un parque ostrícola en la playa de Cesantes que causó una fuerte oposición vecinal. El rechazo lo lideraron las mariscadoras como principal colectivo afectado por la parcelación del arenal, ya que se trataba de una fuente de ingresos fundamental en unos tiempos duros.
El trabajo audiovisual recoge los testimonios de protagonistas directos de aquel episodio, información del proyecto piloto que se pretendía realizar e, incluso, de las instituciones públicas que impulsaron la actuación. También se muestran artículos de la prensa de la época, donde se recogía la oposición que generó en el municipio redondelano con una gran rechazo vecinal, sobre todo por parte de las mariscadoras, ya que el lugar en el que se pretendía instalar el parque ostrícola era uno de los bancos en los que extraían almeja, berberechos, longueirón y otros moluscos que daban sustento a muchas familias que vivían del mar.
El Instituto de Investigaciones Pesqueras, según explicaban en un artículo publicado por FARO DE VIGO el 2 de febrero de 1956, pretendía con esta iniciativa aprovechar las buenas condiciones que ofrecía la Ensenada de San Simón para el cultivo de la ostra, que garantizaba un buen rendimiento en cuanto al crecimiento y calidad del bivalvo. Sin embargo la falta de información sobre el proyecto y, sobre todo, el acotamiento de una parte de la playa con estacas –una extensión de cuatro hectáreas y media– suscitó una gran alarma social en la parroquia, donde gran parte de su población tenía una vinculación directa con la pesca y el marisqueo.
Dos semanas después de la instalación de las estacas, estas aparecieron arrancadas y las cajas ostrícolas destrozadas, por lo que desde el Instituto de Investigaciones Pesqueras se desistió a seguir con el proyecto. Esa es la versión oficial, que también se recoje en el documental junto con los testimonios de los protagonistas de los hechos.
El trabajo audiovisual se estrena mañana con una jornada en San Simón, que arranca a las 15.30 horas con el traslado a la isla desde el puerto de Cesantes (los tickets están agotados). Durante la tarde, además de la proyección del documental, se realizará un homenaje a todos los colaboradores de la iniciativa, con especial atención a las mariscadoras y actuará el grupo Airiños de San Simón, del Circulo Cultural de Cesantes. La organización estima la presencia de unas 300 personas.
