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Las mujeres cogen los remos en Cesantes

El club redondelano logra crear un equipo femenino por primera vez en su historia

El equipo femenino del Club de Remo de Cesantes, ayer, antes de meter la trainera en el agua para el entrenamiento. | // PABLO HERNÁNDEZ

Hace cinco años el Club de Remo de Cesantes se encontraba al borde de la desaparición. Con solo seis remeros ni siquiera completaban ni la tripulación necesaria para sacar la trainera a navegar. Hasta que un grupo de amigos aficionados al remo decidieron tomar las riendas del equipo, con Felipe Silva y Raúl Novelle al frente. Tras un gran trabajo de captación de niños y crear una sólida cantera, el club consiguió el pasado año ascender con la trainera senior a la Liga A de Galicia, y también completar todas las categorías, desde alevín hasta veteranos. Pero todavía quedaba una asignatura pendiente: la presencia femenina era mínima.

La remera redondelana Silvia Úbeda, cuatro veces ganadora de la célebre regata de la Bandera de La Concha, decidió el pasado año dar un paso al frente para intentar crear un equipo de chicas. Consiguió reunir a cinco, pero la pandemia del COVID y el confinamiento supuso un freno para poder competir en bateles. Lejos de rendirse, y tras una campaña de promoción en las redes sociales realizada por otra de las integrantes del equipo, Ana Hermida, el club logró sumar este verano a otras doce aficionadas. Así, con 17 remeras cargadas de ilusión, iniciaron el pasado mes de junio los entrenamientos para conformar, por primera vez en su historia, una trainera femenina.

"Para nosotras ya es una gran proeza poder reunir una tripulación para competir en trainera"

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El objetivo está puesto en la temporada gallega de traineras, que se celebra durante los meses de verano desde junio a septiembre, aunque por delante tienen todo el invierno y la primavera ir cogiendo experiencia con los entrenamientos y las pruebas de bateles y trainerillas. “Para nosotras ya es una gran proeza poder reunir una tripulación suficiente para competir en trainera, así que nuestro objetivo a partir de ahora es disfrutar la experiencia, los resultados serán lo de menos”, indica Hermida, que anima a todas las chicas que quieran probar este deporte a acudir cuando quieran a las instalaciones del club en Cesantes. “Es una disciplina muy dura y requiere mucha constancia, no lo voy a negar, pero tiene algo que te engancha. Una vez que empiezas, si te gusta, no te importa el sacrificio que supone entrenar seis días a la semana y salir al mar haga frío o calor”, afirma.

"Es muy duro y requiere mucha constancia, pero tiene algo que te engancha"

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Una de las características de este deporte es la unión que existe entre las integrantes del equipo. “Desde el primer momento haces piña, hay mucho compañerismo. Esto es algo fundamental porque a la hora de remar todas tenemos que ir al mismo ritmo, si una baja el rendimiento perjudica al resto, así que la unión es total”, explica Hermida.

El club de Cesantes ha tenido un crecimiento exponencial en los últimos años. De los seis remeros de 2017 han pasado a más de un centenar en la actualidad. También los buenos resultados en las distintas categorías en las últimas temporadas les ha permitido conseguir patrocinadores y duplicar el presupuesto en dos años hasta alcanzar los 60.000 euros. Una cifra que les ha permitido renovar el material y adquirir una trainera de última generación, valorada en 40.000 euros. Desde la directiva no se ponen límite en el crecimiento. “Hemos realizado campañas de captación de niños en los centros escolares y estamos apostando fuerte por dar a conocer este deporte que siempre tuvo una gran tradición en la zona”, comenta Sergio Vilas, uno de los miembros de la directiva.

Nuevas instalaciones

El único freno que tienen para continuar con este ascenso imparable son las instalaciones, deficientes para un club puntero en el remo gallego. Se limitan a una nave en la zona portuaria para guardar las embarcaciones, en la que han habilitado un pequeño gimnasio en una doble planta, y una especie de galpón en la zona de la playa en la que tienen el foso de remo y otro pequeño gimnasio para las categorías inferiores. “Llevamos mucho tiempo escuchando la promesa del Concello para dotar al club de unas instalaciones nuevas, pero pasan los años y todo sigue igual. Y mientras vemos cómo se van mejorando campos de fútbol y otras instalaciones deportivas del municipio. No estamos en contra de esto, pero parece que el remo no cuenta y nos tienen olvidados. Creemos que ya es hora de que esto cambie”, concluye Vilas.

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