Tras superar su cuarto verano desmoronado por el deterioro acumulado de décadas, el concurrido paseo de A Foz do Miñor será reparado al fin antes de que acabe este año. Así lo prevé la Jefatura Territorial de Costas en Pontevedra, que ha encargado la semana pasada los trabajos para recuperar el tramo de 50 metros que se hundió en la primavera de 2018 a la empresa pública Tragsa por importe de 195.171 euros.
El organismo estatal prevé que las obras arranquen en las próximas semanas y que finalicen en tres meses, el mismo plazo que establecía el proyecto aprobado ya el pasado mes de febrero. La intención inicial era abrir un concurso público para contratar el arreglo del sendero costero que une Baiona con Nigrán antes del verano.
El proyecto retranqueará la plataforma 4 metros
Pero la tramitación administrativa se complicó y Costas ha preferido renunciar a la licitación pública para encomendar directamente a Tragsa los trabajos, consistentes en la sustitución del muro actual por un manto de escollera similar al existente en el resto del trazado hacia el suroeste. Se procederá además a a retranquear 4 metros el tramo afectado, de manera que le pie de la escollera no ocupe más superficie de marisma que el actual muro.
Esta intervención se plantea como una primera fase de la reconstrucción posterior del resto del paseo con la misma tipología de talud de escollera.
Se han cumplido casi tres años y medio desde el derrumbamiento que seccionó uno de los principales puntos de afluencia turística de la comarca miñorana. El incidente obligó al Ayuntamiento a acotar el espacio para evitar riesgos a los viandantes y desde entonces permanecen en el lugar, considerado joya paisajística, unas vallas amarillas cada vez más oxidadas.