Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Lupe Comesaña | Madre de Nacho, el joven brutalmente agredido en Nigrán

“La manada que agredió a Nacho sigue con su vida, pero mi hijo no puede salir de casa”

“Le hicieron una encerrona, le dieron una brutal paliza y lo dejaron tirado en el monte”

Lupe Comesaña, madre del joven agredido en Nigrán, Nacho, con las fotos de sus lesiones. | // ANXO GUTIÉRREZ

Tras un año recluido, primero en un hospital para recuperarse de las lesiones físicas más graves, y luego en casa, donde todavía persisten las secuelas psicológicas, Nacho, un joven de 25 años de Nigrán, ha sacado fuerzas para denunciar públicamente su historia: fue brutalmente agredido por una manada que lo dejó moribundo en el monte tras un encontronazo en un local de ocio nocturno el 16 de agosto de 2020. La noticia de la paliza que, con peor suerte, mató a Samuel Luiz en A Coruña fue el punto de inflexión y, aunque todavía no se siente con las fuerzas necesarias como para contarlo en primera persona, tiene en su madre, Lupe Comesaña, su mejor altavoz.

–¿Qué sucedió la noche de la agresión?

–Mi hijo y sus amigos estaban en un local en la zona de Pazos de Urzáiz, en Nigrán, y uno de sus amigos se tropezó con una pandilla y estos lo empujaron tan fuerte que lo tiraron al suelo. Nacho lo vio y les fue a pedir explicaciones. La cosa quedó ahí y mi hijo decidió marcharse. De camino al coche le siguieron cuatro tíos que le gritaron “Nacho, hijo de puta, te vamos a matar”. Entonces echó a correr y se metió entre la maleza, y de ahí al monte, para esconderse. Pero no eran solo cuatro, le hicieron una encerrona, le dieron una brutal paliza y lo dejaron en el monte tirado. No murió porque no estaba de ser, pero le destrozaron la vida.

"Ha perdido un 30% de visión y tampoco puede abrir del todo la boca"

decoration

–¿Qué consecuencias físicas arrastra Nacho desde entonces?

–Lo destrozaron del pecho para arriba y se tuvo que someter a una operación de 9 horas. Ha perdido un 30% de visión y tampoco puede abrir del todo la boca, además de las cicatrices.

–Psicológicamente también le habrá afectado….

–Sí, está en tratamiento psiquiátrico, tiene pesadillas y padece agorafobia; hace un año que vive metido en su habitación, “su zona de confort”, como él le llama. Apagaron la luz que desprendía. Toda la familia está destrozada, mientras tanto estos personajes (los agresores) viven de maravilla.

–¿Cuántos participaron en la paliza? ¿Los conocía?

–Sí, sabemos quién son, son todos de la comarca. Solo hay dos imputados, pero quiero que aparezcan los 8 o 9 restantes. Los únicos imputados son los que pudo ver mi hijo antes de cerrar los ojos en el monte, después ya era una pelota a la que daban patadas y puñetazos.

"Toda la familia está destrozada, mientras tanto los agresores viven de maravilla"

decoration

–¿Qué impulsó a Nacho a denunciar su agresión en las redes sociales casi un año después de los hechos?

–Estaba en el salón viendo la tele y salió lo de Samuel, el joven al que mataron en A Coruña. Nacho y se puso muy nervioso. Empezó a decirme: “Mira mamá, a él lo mataron, a mí por una patada no; él ya no puede contarlo, pero yo sí”. Un par de días después, me dijo que tenía el Instagram abierto y que había colgado la foto de la agresión. “Si estoy vivo es para contarlo”, me dijo llorando. Luego se sorprendió por todos los mensajes de apoyo.

–Usted cogió el testigo….

–Sí, necesitaba hacer algo. He convocado una concentración para el próximo lunes, 16 de agosto, a las 21 horas, frente al Concello de Nigrán. Ese día se cumple un año de la agresión. Lo hago para pedir justicia para Nacho. Antes trabajaba en la empresa del padre. Ahora al estar de baja ya no tiene los mismos ingresos, pero los gastos son el doble: la medicación, el psicólogo, el psiquiatra, los viajes a Vigo al médico. Todo eso no se lo dan los campeones esos que le dieron la paliza; esos están de fiesta, salen todas las noches, van a la playa…La manada que agredió a Nacho sigue con su vida, pero mi hijo no puede ni salir de casa.

Compartir el artículo

stats