Las comunidades de montes de Cepeda y Amoedo, afectadas por los graves incendios de 2017, han inscrito la restauración de sus propiedades en el Registro de Absorciones de CO2 del Ministerio de Transición Ecológica. Esta iniciativa permitirá que, aquellas empresas que quieran compensar su huella de carbono, puedan colaborar en la financiación los trabajos de restauración, ya que pueden adquirir los derechos de absorción generados por los más de 100.000 árboles plantados.

Cepeda y Amoedo, ambas en Pazos de Borbén, sufrieron graves pérdidas por los incendios de octubre del 2017, ya que el fuego calcinó por completo la superficie forestal de ambas parroquias, 190 hectáreas en el caso de Cepeda y 372,5 en el de Amoedo. Desde entonces, ambas comunidades trabajan en la recuperación ambiental de las superficies quemadas, un proceso que ahora refuerzan con la inscripción de esas plantaciones en el Registro de Absorciones de CO2, lo que permitirá que las dos comunidades puedan recibir fondos de las empresas interesadas en compensar su huella de carbono.

Los fondos que se capten serán destinados, de manera íntegra, a la restauración de la superficie quemada, permitiendo así completar los trabajos silvícolas previstos para alcanzar el objetivo de que esas masas forestales lleguen la adultas.

Pino del país y frondosas

Los trabajos de reforestación se llevaron a cabo en una superficie de 111 hectáreas, donde se habilitaron masas de pinos del país y de frondosas caducifolias, sobre todo castaños, robles y abedules. En total, en esa superficie se plantaron más de 100.000 árboles que está previsto que capten en torno a las 27.000 toneladas CO2 durante los períodos mínimos a lo que las comunidades se comprometieron a mantener las masas en pie, períodos que oscilan entre los 35 y los 50 años.

Toda la zona reforestada contará con certificación FSC y PEFC, lo que es una garantía hacia una gestión sostenible, y más de un tercio de la superficie restaurada (40 hectáreas) será destinada a funciones protectoras, sin fines productivos, donde se instalarán principalmente masas de frondosas autóctonas.