Los proyectos de los parques eólicos que están planteados en terrenos que afectan a municipios como O Rosal, Tomiño, Baiona u Oia llevan en boca de todos varios años. No son pocos los detractores de estas iniciativas al considerar que perjudicarán a los montes de estos municipios. Pero lo cierto es que cada vez son más los promotores y proyectos que están surgiendo para explotar esta energía renovable en la comarca del Baixo Miño y su entorno. El Concello de Oia es consciente de ello y por eso ha decidido habilitar un servicio de asesoramiento vecinal sobre los proyectos eólicos que afectan al municipio. De esta forma, un técnico contratado por la administración local será el encargado de realizar el asesoramiento desde la propia oficina habilitada para ello. Un servicio que estará coordinado por la propia alcaldesa, Cristina Correa.
El gobierno local decidió poner en marcha este servicio ante la complejidad de la cuestión y “teniendo en cuenta la poca información que, por lo de ahora, existe al respecto”. Según apunta la propia regidora de Oia, el técnico contratado por el Ayuntamiento estudiará las distintas afecciones de las instalaciones eólicas que han sido solicitadas en el municipio y ofrecerá información a los vecinos que lo soliciten.
Además, Cristina Correa anuncia que creará una comisión de seguimiento sobre estos parques a la que se invitará a los representantes de los grupos municipales y de las comunidades de montes del municipio.
El Concello defiende la apuesta por las energías renovables pero reconoce que “causa cierto desasosiego” el interés de tantos promotores en desarrollar parques eólicos. Ese rechazo lo han visibilizado distintas asociaciones ecologistas y sobre todo los comuneros. Por ejemplo, la propia comunidad de montes de Santa María de Oia, que anunció a finales del año pasado su negativa a ceder el uso de sus terrenos para la instalación y paso de infraestructura para el parque eólico del Merendón, el cual afecta a los comuneros de Loureza, O Rosal y Oia.
