El cierre fronterizo del Norte de Portugal con Galicia y que está generando tantos quebraderos de cabeza a vecinos y especialmente trabajadores ha llegado a la Unión Europea. Y es que nueve eurodiputados de diferentes signos políticos han decidido interceder para intentar solucionar el problema. Y lo han hecho dirigiéndose directamente a Pedro Sánchez y al primer ministro portugués, Antonio Costa, a los que les han enviado sendas cartas explicando la situación caótica actual y reclamando una alternativa urgente. En la misiva, los eurodiputados recuerdan que de los 27 pasos fronterizos existentes entre Galicia y el Norte de Portugal, tan solo dos están abiertos de forma continuada: el puente internacional Tui-Valença y el paso de Chaves-Verín. Por su parte, otros pasos como Arbo-Melgaço o Salvaterra-Monçao abren algunas horas al día, aunque no de manera continuada. Sin embargo, el puente entre Tomiño y Vilanova da Cerveira está totalmente cerrado al tránsito. Una situación que en principio durará hasta el 30 de abril, como anunció el gobierno portugués. Pero los afectados no pueden esperar tanto.
Porque, como recuerdan los eurodiputados, estas restricciones a los desplazamientos entre Galicia y el Norte de Portugal perjudican muy especialmente a los más de 12.000 trabajadores transfronterizos y a los transportistas que cruzan cada día al país vecino para desplazarse a su lugar de trabajo. Estos ciudadanos se ven obligados diariamente a recorrer muchos kilómetros de rodeos y a soportar largas colas de varias horas en los pasos transfronterizos para cruzar al país vecino. Por eso en ambas cartas a los líderes de Portugal y España les piden que reconsideren las restricciones fronterizas entre Galicia y el Norte de Portugal que han impuesto y procuren suavizarlas, sobre todo en favor de los trabajadores transfronterizos.
"En efecto, consideramos que es necesario que los Gobiernos español y portugués abran el máximo número de pasos transfronterizos durante el mayor número de horas posibles, incluyendo muy especialmente el paso entre Tomiño y Vilanova da Cerveira —como viene reclamando insistentemente la AECT Río Miño—, sin perjuicio del control sanitario necesario”, defienden.
Los eurodiputados recuerdan además que Portugal y España recibirán aproximadamente 55,5 y 53,5 millones de euros, respectivamente, del Fondo de Solidaridad de la Unión Europea, del que ya han recibido pagos por valor de 37,5 y 16,8 millones de euros. Esta financiación está destinada, entre otras cosas, a proporcionar ayuda a la población y a prevenir, vigilar y controlar la propagación de la pandemia. “Es el momento de que la población y los territorios de la raia, especialmente afectados por la crisis pandémica, se incluyan plenamente en estos planes. Teniendo en cuenta las pérdidas sufridas por la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal, nos gustaría saber si las cantidades adelantadas se destinan o se van a destinar a compensar las pérdidas sufridas por estas poblaciones y territorios”, apuntan.
Los eurodiputados que han firmado estas cartas al presidente de España Pedro Sánchez y al primer ministro de Portugal Antonio Costa son Francisco Millán Mon, José Manuel Fernández, Paulo Rangel, Lidia Pereira, María Graça Carvalho, Álvaro Amaro, Claudia Monteiro de Aguiar, Adrián Vázquez Lázara y Ana Miranda Paz.
