Incentivar la economía local tras un año difícil que se ha complicado todavía más en el último mes para la hostelería es la prioridad para todos en Baiona. Así que la propuesta del alcalde, Carlos Gómez Prado, de trasladar a octubre el principal evento de la villa recibió ayer un apoyo generalizado. Salvo algunas dudas sobre el respeto a la efeméride, portavoces políticos y de la Asociación de Empresarios e Comerciantes baionesa (Aceba) coinciden en respaldar la organización de actos lúdicos pasado el verano, aunque no se llamen igual. Todos tienen claro que en dos meses es “inviable” afrontar una fiesta de interés turístico internacional como la baionesa. Y si otra celebración con el mismo título como la Feira do Cocido de Lalín se cambia a mayo o el Xacobeo se prorroga un año, ¿por qué no?.

A la espera de la reunión convocada el lunes por el regidor para abordar el asunto, el presidente de Aceba, Marcos Comesaña, dejó claro que el colectivo “siempre apoya los eventos que se organicen en beneficio de los negocios locales”. Prefiere “respetar lo que ya existe con un nombre y una fecha determinada y crear nuevos eventos”. “Todo el mundo sabe qué día es la Arribada. Es como aplazar la cabalgata de Reyes al 21 de marzo. Otra cosa es conseguir hacer algo que no se llame Arribada y trabajar para que al salir de todo esto tengamos dos fiestas”, comenta.

Entre los políticos, surgen también las dudas sobre la vinculación de la Arribada al 1 de marzo, día de 1493 en que la carabela “La Pinta” arribó a Baiona con la noticia del Descubrimiento de América, pero respaldan “cualquier iniciativa por la dinamización económica”.

Los tres socios del gobierno tripartito abordarán el asunto el lunes, pero Carlos de la Peña, portavoz de Nós-Baiona, adelantó ayer su colaboración. “Hay que hacer lo ordinario y lo extraordinario para favorecer a los comerciantes y hosteleros en este momento”, subrayó. Personalmente, el independiente apuesta por “respetar la efeméride” y afirma que “un mercado medieval puede ser suficiente en octubre”. No obstante, se muestra “abierto al diálogo para todo”. El BNG no se pronunció ayer sobre el asunto.

Desde la oposición, el portavoz del PP, Ángel Rodal, insiste en que “todo lo que sea para la recuperación bienvenido sea”. “Otra cosa”, afirma, “es el rigor histórico”, sobre lo que, considera, “habrá mucho que hablar”. Al líder de los populares no le “parece mal” la fecha propuesta por el regidor, aunque “habrá que analizar las opciones”.

La representante de Ciudadanos, Rosa Piñeiro, tampoco se opone “de entrada” al aplazamiento de la fiesta de interés turístico, aunque apela a la prudencia dada la situación sanitaria. “El gobierno puede contar con mi apoyo. Me parece acertado no suspender la Arribada y buscar una alternativa para reactivar la economía. Hay que volver a la vida en Baiona”, recalca. Eso sí, “siempre que la evolución de la pandemia y la incidencia de contagios lo permitan”.