El coronavirus trastoca el calendario de 2021 y deja en el aire las grandes citas festivas de los próximos meses. Sevilla ha suspendido ya prácticamente la Semana Santa y la Feria de Abril y Valencia ha pospuesto las Fallas al verano. Baiona también quiere salvar su principal cita turística y propone aplazar la Festa da Arribada. Todavía no hay fecha oficial pero el gobierno municipal considera el primer fin de semana de octubre el más idóneo.
Como cada 7 de enero, una vez finalizadas las fiestas navideñas, el equipo de gobierno de Baiona se puso ayer manos a la obra con la celebración histórica. En esta ocasión, el asunto sobre la mesa no era el programa de actos o la distribución del mercado medieval, sino la fecha. Alcalde y concejales tienen claro que la llegada de la carabela “La Pinta” a la villa con la primicia del Descubrimiento de América no podrá conmemorarse coincidiendo con la efeméride, el 1 de marzo. La incidencia de contagios, que llegó a acumular más de 360 casos, dejó a la localidad en navidades con las máximas restricciones de cierre perimetral y limitaciones al aforo y al horario de la hostelería. La cifra ha bajado “un poco” en los últimos días, pero todavía falta el previsible repunte postnavideño, explica el alcalde, Carlos Gómez, que ya descarta organizar la multitudinaria fiesta para dentro de dos meses.
El objetivo es ayudar a la hostelería, principal motor económico local, tras el golpe navideño. Las restricciones provocaron pérdidas de en torno a 3 millones a los negocios baioneses del sector, según los cálculos de los afectados, que tampoco tenían esperanzas ya en la Arribada para salir del bache.
El regidor planteó ayer mismo el cambio de fecha a la directora del organismo autonómico Turismo de Galicia, Nava Castro. Ahora tendrá que solicitarlo formalmente porque así lo marca el protocolo al tratarse de una fiesta de interés turístico internacional desde hace seis años. A continuación, Gómez concertó una reunión con los portavoces de todos los grupos municipales el próximo martes con el fin de consensuar la fecha definitiva, que deberá aprobar el pleno.
A la espera de lo que decidan los representantes municipales, el gobierno municipal apuesta por el primer fin de semana de octubre. Por varias razones, sobre todo por la seguridad sanitaria. “Para entonces está previsto que esté vacunada la mayor parte de la población”, señala el alcalde. La proximidad con el Día de la Hispanidad y la relación histórica entre ambas conmemoraciones también es otro de los motivos de la preferencia del tripartito, apunta Gómez Prado, que también destaca la desestacionalización de las visitas que supone la fecha propuesta.
El regidor espera contar con el apoyo económico de Xunta y Diputación de los últimos años para salvar la Arribada 2021. El Concello organiza un amplio programa de actos para los cientos de miles de personas que disfrutan de la fiesta con ayuda de subvenciones que suman 94.000 euros. El organismo provincial aportó 44.000 en 2020 y la Xunta 40.000. Los 10.000 restantes corrieron a cargo de Abanca.