A cualquier hora del día, con el paraguas abierto o cerrado y soportando el frío polar con el que se ha despedido 2020 y ha arrancado 2021. En las últimas semanas la calle peatonal de Porriño es un continuo reguero de gente que hace cola para probar suerte en El X de la Suerte, la administración que siempre descorcha una botella por Navidad para celebrar la venta de alguno de los grandes premios de la Lotería Nacional. El pasado 22 de diciembre consolidó su fama haciendo triplete (vendió el Gordo, un quinto y un cuarto) y desde entonces las colas doblan la calle porque todos quieren tentar por segunda vez a la diosa Fortuna en el sorteo del Niño. “Es una locura”, define Andrés Martínez, responsable de “la Doña Manolita de Galicia”, como el mismo dice que conocen a El X de la Suerte; una fama que ya ha traspasado el ámbito provincial.

Andrés y su hijo Benja llevan desde finales de noviembre haciendo su particular agosto, aunque con una caída en las ventas respecto a otros años a consecuencia de la pandemia. Una caída que levantaron los niños de San Ildefonso cantando tres de los premios gordos del sorteo de Navidad y haciendo efecto llamada, que se traduce en colas más largas. “Nunca habíamos tenido tanta gente”, cuenta “Don Andrés”, cuya administración se ha adaptado a la “nueva normalidad” y al cierre perimetral de la almendra de Vigo posibilitando la venta online a través de la página web de El X de la Suerte. “Tenemos pedidos de todos los puntos de España, de Europa e incluso alguno de Sudamérica”, cuenta.

Ayer, penúltimo día para comprar un boleto de la lotería de Reyes, las colas llegaron a alcanzar la casa consistorial, casi 100 metros, con distancia de seguridad y mascarilla. Por la mañana, entre tanto trabajo, se produjo la anécdota de la jornada. Un cliente acudió con un boleto del sorteo de Navidad para comprobar en la máquina. Era el agraciado del cuarto premio, que guiñó el ojo a Andrés como señal de agradecimiento y complicidad.

Hoy será el último día de trabajo ininterrumpido con tres personas despachando suerte en taquilla. “Abriremos desde las 8.30 hasta las 21.00, aunque no nos iremos hasta que no quede ni un cliente sin atender”, promete Andrés Martínez, que desde hace nueve años recibe la vista de los medios de comunicación cada 22 de diciembre y 6 de enero. En 2019 vendió dos décimos de la lotería de Reyes que espera superar en este esperanzador 2021.