El Juzgado de lo Mercantil número cinco de Madrid respondió con celeridad inusitada a un oficio de la Valedora do Pobo, María Dolores Fernández Galiño, en el procedimiento de una queja por el estado calamitoso de la Fonte de Troncoso, en Mondariz Balneario, cuya empresa propietaria esta en liquidación. Sorprende porque el Poder Judicial no entra dentro de los supuestos de facultad de supervisión de la Valedora y mucho menos en Madrid.

– ¿Le ha impresionado a usted la respuesta de este juzgado de Madrid?

– Me ha sorprendido la rapidez y he sentido una alegría inmensa porque cuando se trata de salvar el patrimonio el tiempo juega en nuestra contra. La respuesta ha venido a canalizar la preocupación de todas las personas, instituciones y colectivos implicados para que pueda resolverse de forma satisfactoria. Desde luego ha sido muy significativa la inmediata respuesta del juzgado. Tenemos que destacar esa cooperación, celeridad, contundencia y eficacia.

– ¿En este expediente actuaron ustedes de manera diferente a otros?

– No inicialmente. Ha habido una asociación promotora que nos ha formulado la queja sobre el estado ruinoso de un bien de interés cultural, la Fonte de Troncoso de Antonio Palacios. Después en la tramitación se ha dado la excepcionalidad de tener que dirigirnos a un juzgado, donde no tenemos facultad de supervisión, y de fuera de Galicia.

–¿Pero igual si hubo más rapidez por su parte?

–Para nosotros la celeridad en la atención de las quejas es un lema. También es cierto que en ocasiones no podemos actuar con la premura que el caso nos pide. Pero desde luego que lo intentamos siempre. En este expediente de queja también quisimos trasmitir al juzgado la urgencia en buscar una solución por el estado de la fuente.

– Cuando la queja de SOS Fonte de Troncoso llegó a sus manos, ¿hubo una primera impresión?

– Hubo la inmediata decisión de ponernos a trabajar sin perder un minuto. Conocemos muy bien la obra de Palacios y la Fonte de Troncoso es una referencia importantísima no solo de Mondariz Balneario y de toda la comarca del Condado, sino de Galicia. Y además teníamos la constatación de que era un asunto que había movilizado a la ciudadanía e instituciones locales y gallegas de ámbito local y autonómico.

– ¿Es habitual en la Institución de la Valedora do Pobo tratar asuntos relacionados con el patrimonio?

– En algunas ocasiones llegan a nosotros quejas. Recientemente tuvimos una intervención relacionada con el Mosteiro de San Salvador de Asma, en Chantada, sobre unas obras ilegales que se concluyó satisfactoriamente con un expediente urbanístico de reposición de la legalidad. También es cierto que hay actuaciones largas y complejas en relación con concesiones mineras y colisión con bienes arqueológicos. Los temas de patrimonio son muy complejos porque hay a veces colisión entre unos derechos que pueden estar reconocidos en una licencia urbanística o en una autorización administrativa que chocan contra este tipo de bienes que en ocasiones no están debidamente catalogados, sobre lo que también tenemos actuaciones.

– La queja de Mondariz Balneario parte de una Plataforma...¿Son habituales las denuncias de asociaciones?

– En número son más las personas que individualmente se dirigen a nosotros, pero también hay muchas asociaciones y mucha colaboración con las entidades sociales, sobre la cultura, la defensa de la lengua, de las personas con discapacidad, de la promoción de la igualdad LGTBI, de las mujeres...

– ¿Son ustedes el último recurso de amparo frente a administraciones que no resuelven?

– A veces sí vemos que nuestra Institución es el último recurso, como se ha producido en este caso. Pero eso no siempre demuestra un mal funcionamiento de la administración que muchas veces tiene que actuar con un procedimiento que es su propia garantía de objetividad y deja fuera supuestos más específicos o problemáticos que necesitan un tratamiento más individualizado.

“La pandemia ha provocado numerosas quejas”

– ¿Qué ha supuesto la pandemia que estamos viviendo para ustedes? ¿Más quejas quizás?

–Ha supuesto una especialización de las quejas. La pandemia es una emergencia sanitaria pero también económica y social. Como nuestra institución está muy cerca del pueblo empezaron a llegar quejas al respecto y todas nuestras áreas tienen numerosos expedientes relacionados con la pandemia.

– Recientemente fue el Día Internacional contra la Violencia de Género y usted es la segunda mujer Valedora. ¿Como abordan esta problemática?

– Tenemos en marcha una labor de la propia institución de promoción de la igualdad y de lucha contra la violencia de género. Escuchamos permanentemente a las mujeres y manifestamos nuestra constante repulsa a la violencia de género. También atendemos quejas o iniciamos investigaciones de oficio. Somos parte de un quehacer general de todos los poderes públicos, de la administración de la sociedad en su conjunto para conseguir que se haga realidad el derecho a vivir sin violencia de género en cualquiera de sus formas.