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Un “sí quiero” en “streaming”

Más de cien invitados de todo el mundo siguen “online” la boda de Óscar y Renata desde Nigrán

Un momento de la boda en el Concello, con el equipo técnico de la retransmisión. Manuel Correia

Lo que ha unido el Covid que no lo separen las restricciones. La pandemia ha arruinado, o al menos postergado, los planes de boda de miles de parejas pero en el caso de Óscar y Renata, vecinos de Nigrán, ha ocurrido todo lo contrario. Se enamoraron con la ayuda de las limitaciones a la movilidad y en el mismo contexto decidieron sellar su amor de manera oficial este domingo. La ausencia de familiares y amigos no fue obstáculo para hacerlo, ya que todos estuvieron muy presentes en la ceremonia. El suyo fue el primer enlace matrimonial en “streaming” en el Concello nigranés y más de cien invitados de diversos rincones del mundo lo siguieron “online” en directo .

Detalle del enlace en un móvil Cris Grande

Hasta diez personas podían reunirse en el salón de plenos, según las indicaciones oficiales. Finalmente fueron nueve. Los novios, el alcalde/oficiante, Juan González, tres músicos, dos testigos y una camarógrafa. Uno de los “notarios” de la unión civil es Mintxo Alejos, productor musical que además se encargó de la retransmisión en directo, mientras que Cris Grande hizo lo propio con las fotografías y vídeos. Ambos trabajan en la consultora de comunicación y productora audiovisual Ñó! Espazo Creativo de Sabarís. Una compañía que hasta que llegó el coronavirus realizaba toda clase de encargos de promoción y publicidad y de fotografía y vídeo de eventos familiares y sociales. Los servicios de “streaming” eran anecdóticos en su agenda hasta el pasado verano y se han convertido ya en su principal ocupación. “Al no poder organizar reuniones, estamos trabajando mucho en retransmisiones para todo tipo de eventos institucionales, empresariales, educativos y privados”, comentan.

No por íntima fue menos emotiva la celebración. No faltaron la música ni los sentimientos a flor de piel a través de las pantallas. Los novios las utilizaron para enviar sus mensajes a sus seres queridos. Madrileño él y polaca ella, la comunicación audiovisual con sus parientes y amigos resultó igual de cariñosa que si las distancias fuesen cortas. Óscar es ingeniero y asesor en producción textil y ha trabajado en varios países donde ha dejado amigos. Renata es economista y su trayectoria profesional se ha desarrollado también en numerosos rincones del planeta. Y enviaron besos y abrazos virtuales a todos esos lugares. El enlace se siguió desde varios puntos de España, Estados Unidos, Portugal, Bangladesh y Francia.

“Ahora lo celebraremos en la intimidad, pero en cuanto se abran las limitaciones haremos una fiesta con todos”

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Ya habrá tiempo para los de verdad. “Ahora lo celebraremos en la intimidad, pero en cuanto se abran las limitaciones haremos una fiesta con todos”, anunciaron tras darse el “sí quiero”.

Lo importante para ellos en este momento era oficializar su amor “en este año tan atípico”. Y es que iniciaron su relación en junio, cuando el virus ya se había acomodado entre nosotros, y no querían dejar pasar un tiempo que recordarán de por vida para dar un contexto especial a su boda. “Yo estaba trabajando en Portugal y Renata lo hacía en Bangladesh. Ella ya no pudo volver a su casa a Polonia por las restricciones y se quedó por Portugal, así que la invité a venirse a Nigrán”, recuerda Óscar.

“La opción era esperar indefinidamente o tirar para delante en la fecha que queríamos”

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Y surgió el amor. El paréntesis de contagios del verano los animó a organizar la ceremonia, “siempre con el 22 de noviembre en la cabeza porque era un día especial para nosotros”, apuntan. Pero llegó la segunda ola, las limitaciones otra vez, el cierre perimetral, el de la hostelería... Los invitados tuvieron que olvidarse de viajar... “La opción era esperar indefinidamente o tirar para delante en la fecha que queríamos”, concluyen. Y fueron felices y comieron en petit comité.

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