El joven vecino de Nigrán acusado de asaltar al menos en cuatro ocasiones la iglesia y la casa rectoral de San Pedro de A Ramallosa aceptó ayer una condena de dos años de prisión por dos delitos continuados de robo con fuerza. El chico, A.C.R. de 22 años de edad, podrá evitar el ingreso en la cárcel si afronta los gastos derivados de la responsabilidad civil por apropiarse de un ordenador portátil propiedad del párroco y de algo más de 550 euros y siempre que acuda a cursos de educación cívica y realice trabajos en beneficio de la comunidad. El Juzgado de lo Penal Número 2 de Vigo acogió ayer el juicio que finalizó con un acuerdo de conformidad.

Agentes de la Guardia Civil sorprendieron "in fraganti" al acusado la madrugada del 9 de abril de 2018 en la rectoral, cuando trataba de forzar con unas tijeras el arcón donde el sacerdote guardaba la cruz parroquial y otros enseres. Minutos antes había tratado de entrar en la iglesia pero el cura ya había cambiado la cerradura tras otros tres asaltos en semanas anteriores.

El primero se produjo el 2 de abril. Accedió a la rectoral por una ventana posterior tras desmontar el marco y se llevó el ordenador y y el dinero, además de un juego de llaves con el que logró entrar en el templo para violentar la caja fuerte sin éxito. Volvió al día siguiente, primero a la casa y después a la iglesia, pero el párroco había retirado todos los objetos de valor. El día 5 de abril regresó e intentó abrir el citado arcón sin conseguirlo.

La Fiscalía solicitaba 4 años y 11 meses de cárcel que finalmente acabaron reducidos al reconocer el acusado los hechos.