Tan solo un mes después de convertir una vieja presa de regadío en piscina vecinal, la comunidad de montes de Couso acaba de habilitar otro nuevo espacio de ocio. La entidad ha recuperado el viejo campo de fútbol cerrado hace 34 años para la práctica de deporte, pero también para sacar un beneficio económico alquilándolo para eventos. El recinto mide 8.700 metros cuadrados y ofrece el espacio necesario para organizar cualquier tipo de evento con garantías de distancia de seguridad en la era del Covid-19.

Un grupo de vecinos de la parroquia gondomareña formaron hace unos años un equipo de fútbol aficionado que juega sus partidos como local fuera. Casi siempre en el campo de As Cancelas, en Donas. Ahora ya disponen de terreno de juego propio con pavimento de tierra, porterías y banquillos e incluso un aparcamiento de 2.000 metros cuadrados.

En un lateral del terreno de juego, los comuneros han realizado un desmonte para crear una zona para practicar atletismo. "No se puede considerar una pista oficial porque no reúne ciertos requisitos del reglamento, pero resulta una zona idónea para el entrenamiento", explica el presidente de la comunidad de montes, Xosé Antón Araúxo.

El complejo no solo está pensado para la práctica deportiva, sino para el ocio de todo tipo, y los comuneros lo ofrecen a quien desee organizar conciertos, ferias o espectáculos de cualquier tipo que requieran recintos d grandes dimensiones- "Esta área de la parroquia de Couso está disponible, tiene vocación abierta y aspira a recibir actos promovidos por plataformas, asociaciones, organizaciones o empresas de Gondomar, del Val Miñor o de fuera", recalca Araúxo.