Tan solo queda una vivienda pública de la Consellería de Educación reservada a docentes en Nigrán y el Concello la quiere para darle un uso social, como todas las demás del municipio que un día fueron hogar de los profesores de las antiguas unitarias y hoy albergan todo tipo de actividades vecinales, lúdicas y culturales e incluso terapéuticas. La última casa de maestros nigranesa está en Camos y fue construida junto con otra gemela hace más de un siglo para ofrecer hogar a los profesores de la escuela Balinfra.
Hace más de quince años que la Xunta cerró aquel pequeño colegio. El Ayuntamiento solicitó en 2010 la reversión de las edificaciones y logró hacerse con la titularidad de las aulas, que albergan actividades vecinales y culturales, y con una de las dos viviendas del conjunto, reformada con un doble objetivo. Acoge los programas de respiro familiar del centro de atención a la diversidad funcional Juan María y puede cederse en caso de emergencia a vecinos que circunstancialmente se encuentren sin techo.
La otra es la casa en cuestión. Sigue adjudicada como vivienda docente aunque el gobierno municipal asegura que ya nadie vive allí desde hace años y pretende convertirla en su segunda vivienda municipal de uso social. Así lo constata un informe de la Policía Local remitido a la Xunta hace una década, cuando se reclamó la desafectación. El Ayuntamiento vuelve a solicitar a solicitar a Educación que la revierta porque "esa vivienda perdió el uso educativo porque el colegio lleva años cerrado y porque no está siendo utilizada por la persona que la tiene concedida", explica el alcalde, Juan González. El regidor insiste en que "no es lógico que no podamos usarla para fines muy necesarios como apoyo a personas con necesidades especiales o sin recursos".
Vecinos del entorno han denunciado incluso que la casa recibe esporádicamente inquilinos ajenos a la parroquia. "Desconocemos si se usa como vivienda de vacaciones, si se alquila o qué ocurre. La Xunta debe revisar la concesión porque se trata de un inmueble público", recalca el regidor.
A excepción de la unitaria de As Dunas, que sigue funcionando como escuela infantil en Panxón, las aulas y viviendas antiguas del municipio son ya municipales. Las casas de maestros junto al Concello han sido sede de los bomberos, del ropero municipal y ahora está en proceso de convertirse en local social para la tercera edad. La asociación vecinal de Nigrán usa la de O Ceán. La de Priegue es sede de la asociación de vecinos A Irmandade. La de Chandebrito ofrece espacio a la asociación de Mulleres Rurais y al colectivo Chandebrito 1807. La asociación vecinal Monteferro de Panxón tiene local en la de A Porqueira. Y en Cotros están la escuela municipal de cerámica, el club Xadrez Laroca y la asociación de colombofilia.
