La primera gasolinera "low cost" de la provincia de Pontevedra está prevista en Sabarís y ya cuenta con más de medio millar de detractores antes de obtener la licencia municipal. La Xunta ha autorizado el negocio de combustible de bajo coste y ahora el proyecto está en el tejado del Concello de Baiona, que lo analiza para determinar si le otorga o no el permiso definitivo para instalarse en la Rúa Outeiro, el vial paralelo al acceso a la autopista AG-57. Un grupo de residentes en el entorno ha iniciado una campaña de recogida de firmas contra la estación de servicio proyectada por la empresa Plenoil por considerarla un peligro, "tanto para la seguridad vial de la zona como para la tranquilidad de los vecinos". Ayer se concentraban bajo la pancarta que han colocado para hacer visible su protesta junto a la parcela elegida.

Llevan recogidas casi 700 rúbricas en menos de una semana, casi tantas como personas residen en los barrios afectados de Outeiro, Morade o A Ribeira, según explica Ramón Sarmiento, uno de los más perjudicados al encontrarse su vivienda en la finca contigua a la del futuro negocio.

Se trata de núcleos ubicados en la parte alta de la parroquia baionesa de Santa Cristina, cuyo acceso principal es la carretera junto a la que se prevé la gasolinera. "Es un peligro meter tráfico pesado en un vial de 6,10 metros de ancho sin aceras ni arcén", avisan. Un camino abierto hace medio siglo por parte de los propios vecinos, explica Ramón Sarmiento. "Lo hicimos para dar servicio a las casas. Los propietarios donaron los terrenos, pusimos todos dinero para los materiales y fuimos a trabajar para hacer la calzada", recuerda Sarmiento.

El riesgo crecerá, recalcan, el la glorieta de la autopista, "cuando vengan los camiones a traer gasóleo o gasolina". "Ya es peligrosa ahora para los que vamos hacia arriba, no queremos pensar lo que va a ser después", dejan claro.

También los inquieta la idea de convivir con depósitos de combustible al lado de casa. La compañía prevé instalar dos surtidores, uno de gasolina 95 con tanque de de 40.000 litros y otro de gasóleo A con su reserva de 30.000. "Estarán a 15 metros de nuestras viviendas y no sabemos qué puede pasar", se quejan.

Precio

Pero no todo es rechazo al negocio en el municipio, ni siquiera en la parroquia. El precio del combustible, hasta 13 céntimos más barato que en las estaciones de servicio atendidas, es un reclamo para muchos en la zona. La Asociación de Veciños Castro e Ladeira de Sabarís apoya a los afectados a la hora de reclamar al Concello y administraciones implicadas "que acondicionen los accesos para evitar los riesgos de accidente y que hagan cumplir las normativas de seguridad de manera estricta", señala su presidente, Martín Otero. "Pero también es verdad que hay mucha gente que quiere la gasolinera para ahorrar", afirma el representante vecinal.