La alteración de la actividad laboral para los trabajadores transfronterizos, a nivel distancia, tiempo y costes, supone el 45% de los 250 testimonios, en primera persona, recabados en cuatro días a través de un cuestionario de la Eurocidade Cerveira-Tomiño publicado en Facebook.

Se trata de una actuación realizada por las valedoras transfronterizas de la Eurocidade, para evaluar el impacto de más de dos meses del cierre de fronteras provocado por la crisis sanitaria.

La vida cotidiana de los habitantes del territorio transfronterizo gallego-portugués nunca ha estado tan perjudicada como en estos últimos meses, con una reducción de la mitad de su dinámica económico social, señalan.

Los trabajadores no comprenden cuál es el motivo por el que no pueden atravesar por el Ponte da Amizade Cerveira-Tomiño, agilizando así toda la presión que se ha generado.

Un 25% de los relatos citan servicios esenciales a los que no pueden acceder, como los de carácter educativo, de salud pública (consultas médicas y veterinarias). No pueden utilizar equipamientos deportivos, comerciales o culturales que son accesibles al otro lado del Miño.

El 17% de los relatos explican los efectos económicos negativos que sufren, con una reducción del 70% de clientes, pérdida de empleos o dificultades de abastecimiento de materiales para determinados negocios. Hay ciudadanos transfronterizos con graves dificultades para mantener relaciones y cuidados familiares (familias separadas, mayores sin respaldo familiar, entre otros).