Porriño ha modificado su presupuesto para redirigir 100.000 euros a una línea de subvenciones destinadas a ayudar a los autónomos de la villa, que deben reiniciar una actividad económica paralizada o ralentizada por culpa del Covid-19. Así lo aprobó la corporación en el primer pleno telemático celebrado en Porriño desde que se decretó el estado de alarma. Votaron a favor de esta modificación presupuestaria todos los grupos políticos, a excepción del Partido Popular, que se abstuvo e hizo constar un voto particular proponiendo incrementar esta línea de ayudas a 190.000 euros.

Para crear este fondo de 100.000 euros, de los cuales 75.000 euros se destinarán a gastos corrientes y 25.000 euros a inversiones, el gobierno porriñés ha dado de baja partidas destinadas a la Feria del Pan de Porriño, al Porriño Industrial, al Club Bacaropo, a la promoción cultural y a las ANPAS. La eliminación de la partida consignada a la Feria del Pan, que suele celebrarse a principios de junio, fue criticada por el PP, a lo que la alcaldesa, Eva García de la Torre, contestó que "en junio todavía estaremos en estado de alarma, no estamos en condiciones de celebrar esta fiesta; mejor pecar de cautos que de irresponsables".

Precisamente, la supresión de la partida de la Feria del Pan motivó la abstención del PP sobre este tema. En su lugar, los populares plantearon incrementar la línea de ayudas a 190.000 euros. Para ello proponen sumar 25.000 euros destinados a asistencia a órganos colegiados, comisiones y plenos; 10.000 euros de asignación a grupos políticos; 10.000 euros correspondientes a las bases salariales de corporativos con dedicación exclusiva; 30.000 euros del alquiler del local para el aula de la UNED y 15.000 euros de otros locales propiedad del Concello.

La alcaldesa definió está ayuda de 100.000 euros para hostelería, pequeño comercio y autónomos como "un empujón que les permita reiniciar su actividad y que sepan que nos tienen a su lado". Además, García de la Torre adelantó que el Concello no descarta aprobar nuevas modificaciones presupuestarias en función de las necesidades. "Vamos a tener que atender a muchos frentes", lamentó.

Una adversidad a la que ya llevan haciendo frente desde el inicio del estado de alarma es la emergencia social. En este sentido, la alcaldesa recordó que el Concello está destinando una partida económica muy importante para alimentar a las familias más necesitadas. Así pues, desde el 14 de marzo hasta el 30 de abril, 336 familias integradas por 536 adultos y 311 menores, recibieron ayuda directa del Concello para comprar alimentos frescos y de primera necesidad.

Otra medida aprobada por el pleno de la corporación fue la ordenanza de instalación de terrazas y veladores en los espacios públicos. Habrá un límite máximo de ocupación de 40 metros cuadrados y no se permitirá la instalación de mesas y sillas en los soportales para garantizar el uso peatonal de las vías públicas, según avanzó el teniente alcalde Pedro Pereira. Aún así, teniendo en cuenta las actuales dificultades del sector de la hostelería, la entrada en vigor de esta ordenanza se aplazará hasta octubre y se adecuará a la evolución de la crisis sanitaria y económica.