Con un "hondo dolor de corazón". Así comunicó ayer el párroco-rector del Santuario de Nosa Señora da Franqueira, Xabier Alonso, la suspensión de la Romería das Pascuillas programada para el próximo 1 de junio. Una cita multitudinaria para la que, a día de hoy, "no podemos prever un escenario un escenario favorable y tampoco vemos factible trasladarla a otra fecha por considerar que es desconocido el futuro a largo plazo", indica el párroco.

La decisión, que fue tomada en diálogo con el obispo de la Diócesis de Tui-Vigo, dejará una estampa insólita entorno al templo de A Cañiza el Lunes de Pentecostés, fecha en la que, cada año, miles de romeros y romeras peregrinan desde distintos puntos de la provincia con sus Santos y Santas. Una imagen incompatible con la crisis sanitaria actual y el obligatorio distanciamiento social.

"Sabemos el dolor que supone para los romeros y peregrinos, que cada año con honda devoción acuden a este santuario, aceptar esta medida, pero esto no impide que, en la fecha prevista, podamos unirnos espiritualmente en comunión de fe para elevar nuestras plegarias a la Virgen María", comenta el párroco de A Franqueira, adelantando que "se establecerán canales de comunicación con la parroquias que participan en la Romería para que el día 1 de junio pueda ser una fecha de celebración en las distintas comunidades y en los hogares de los romeros".

Con todo, Xabier Alonso también recuerda que, desde el inicio de la alarma sanitaria, hay una vela encendida en el templo simbolizando las plegarias de los romeros y peregrinos y se celebran Eucaristías diarias a puerta cerrada.