Las antiguas casas de los maestros de Chapela, ubicadas en el recinto que ocupaba el viejo colegio Igrexa, serán derribadas para construir en su lugar un nuevo edificio multiusos que resuelva los problemas de falta de espacio de las distintas asociaciones de la parroquia. Para ello, el gobierno local solicitará a todos los colectivos sociales y grupos políticos que aporten sus sugerencias para poder elaborar un proyecto que atienda, en la medida de lo posible, las necesidades que planteen.

La decisión de demoler las casas fue adoptada por los responsables municipales después de que el informe realizado por los técnicos para valorar el estado de las edificaciones descartase la posibilidad de su rehabilitación para dotarlas de nuevos usos públicos, como solicitaban desde la asociación de vecinos de Chapela.

El gobierno redondelano y la empresa concesionaria Audasa han mantenido varios encuentros en los últimos meses para negociar la reversión de la titularidad de la parcela, un acuerdo que estaba pendiente de firmar este mes pero que se tendrá que retrasar debido a la situación de estado de alarma decretado por el Gobierno ante la crisis sanitaria del coronavirus. Mientras tanto, el equipo de gobierno ya trabaja en la elaboración de un borrador para el proyecto que se desarrollará en la parcela, situada en un lugar estratégico en pleno centro urbano, a escasa distancia del centro de salud, el pabellón de deportes y el instituto de la parroquia.

La alcaldesa redondelana, Digna Rivas, quiere el máximo consenso en cuanto al diseño y características del futuro edificio multiusos, por lo que en cuanto tengan el borrador y la situación lo permita, se entregará a todos los colectivos para que puedan aportar sus sugerencias. "Se trata de que el nuevo inmueble haga una función social y dé respuesta a la mayor parte de las necesidades que planteen las asociaciones, aunque siempre teniendo en cuenta las limitaciones que marquen los técnicos" , puntualiza.

La parcela se sitúa junto a la AP-9, por lo que cualquier construcción deberá cumplir con las distancias que marquen las normativas urbanísticas. Para el resto del solar se contempla destinarlo a zona verde para disfrute de los vecinos, ya que este barrio de Chapela tiene carencia de espacios de ocio y recreo. Por esta razón el Concello solicitó a la empresa encargada del derribo del antiguo colegio Igrexa que, una vez retirados todos los escombros de las edificaciones, se dejara el firme de zahorra en vez de hormigón.

La asociación de vecinos de Chapela había solicitado en su momento al Concello que se aprovecharan las edificaciones de las casas de maestros para, tras una reforma, destinarlas a locales para los distintos colectivos, aunque desde el gobierno local se descartó esta opción en base a los informes técnicos que desaconsejaban la rehabilitación. Por su parte, desde la Asociación de Afectados por la Autopista de Chapela desde el primer momento reclamaron el derribo de las casas de los maestros y propusieron crear en este lugar una gran alameda pública para paliar el déficit de zonas verdes.