Salvo milagro, cambio repentino de las circunstancias o fallo garrafal de las predicciones, los que este año viajen a la Baiona de 1492 tendrán que ir preparados para la lluvia. Y es que la previsión meteorológica augura que lloverá los tres días de la Arribada, aunque no de manera homogénea. Habrá momentos de tregua, pero la nota predominante será de color gris. Eso sí, las temperaturas serán agradables.

Según la información de Meteogalicia, el viernes, las condiciones serán relativamente buenas hasta la noche, cuando empezará a llover con intensidad. Los vientos serán fuertes del sur-sudoeste y las temperaturas oscilarán entre los 10 y los 17 grados Celsius.

El sábado, con la Arribada ya a pleno rendimiento, la situación será de inestabilidad, con ratos en los que no hará falta el paraguas y hasta se dejará ver el sol. Pero conviene no desprenderse de él, puesto que los chubascos serán probables. De nuevo, lo peor llegará hacia la noche, cuando un nuevo frente deje lluvias más constantes. Subirán las temperaturas mínimas, hasta los 12 grados, y las máxima bajarán uno, hasta los 16.

El domingo se presenta, a priori, como el peor día. Las bajas presiones que se mueven por el Atlántico norte continuarán cogiendo a Galicia en su radio de acción, de modo que los cielos estarán muy nublados con lluvias generalizadas durante toda la jornada. El viento soplará moderado del oeste y las temperaturas se mantendrán estables, con un grado más de mínima y la misma máxima.