Los turistas que visiten Redondela, además de disfrutar del choco en los restaurantes en sus distintas variedades, también podrán conocer en primera persona cómo se pesca el producto estrella de la gastonomía local.
La asociación Amarturmar, creada por seis mariscadoras y pescadores de Cesantes, pretende impulsar el turismo marinero con el objetivo de poner en valor las actividades profesionales relacionadas con el mar y a acercar a los visitantes a las labores que desarrollan los trabajadores del sector pesquero y marisquero en el interior de la ría de Vigo. Una iniciativa que arranca la próxima semana coincidiendo con la apertura de la campaña del cefalópodo, y que ya se puede reservar en el teléfono 621020775 o a través del correo electrónico info@turismomarinero.org .
Uno de los impulsores del proyecto, Severino Casal, explica que esta oferta turística se puso en marcha el pasado año en Redondela con el objetivo de crear una alternativa a los visitantes "orientada a poner en valor, promocionar y recuperar la cultura del trabajo profesional del sector pesquero y marisquero, diulgar el proceso de extracción, captura y comercialización de los productos del mar y las artes de pesca que se utilizan".
Las rutas se realizan con dos embarcaciones de pequeña capacidad, limitadas a un máximo de 17 personas, para que la experiencia sea más cercana y no entorpecer el trabajo de los marineros. "No buscamos la masificación de las rutas turísticas con catamaranes de gran capacidad, se trata de que los participantes tengan una experiencia diferente, puedan estar junto al pescador y vean cómo realiza su trabajo mientras que el guía les ofrece toda la información. De esta forma podrán apreciar la dureza de esta profesión y valorar el esfuerzo que realizan los profesionales que se dedican al mar", indica Casal.
A la ruta del cshoco le seguirán durante la primavera y el verano otras similares sobre otras artes, como el marisqueo o el xeito. Esta propuesta pretende promover un tipo de turismo sostenible en la zona que mantenga un equilibrio saludable entre pesca, turismo y medio ambiente, a la vez que ofrece una experiencia diferente al visitante.
Además también organizan otras actividades como acciones formativas, talleres artesanales y divulgativos dirigidos a escolares, para que los niños puedan conocer de cerca el trabajo de los pescadores y mariscadores de una forma didáctica y disfruten del mar de una manera diferente.
