Una historia atípica sobre la vida de un joven que regresa de la muerte convertido en fantasma y que, en busca de otros como él, tiene una serie de aventuras y vivencias que lo harán madurar. Así resumen Francisco Pampillón su primera novela "Un fantasma inquieto" que cualquiera puede leer online accediendo a su web www.fjpampillon.com en donde también podrá adquirirla en formato libro.

Diseñador gráfico e informático, a los 52 años, Francisco se quedó sin empleo y entonces vio una oportunidad para dar rienda suelta a la imaginación y dedicarse a su mayor afición, la lectura y escritura de libros. "Era autónomo, tuve que cerrar porque trabajaba para la construcción, sector gravemente afectado por la crisis y con esa edad me fue muy difícil retomar la vida laboral", señala ahora, que cumplirá este año los 60.

Este no es el primer escrito de Francisco, "siempre me gusto leer, me considero un lector compulsivo, y también escribir, sobre todo cuentos y relatos breves, pero nunca me atreví a publicar nada hasta ahora", confiesa. Casado y con dos hijos, Francisco llevó en secreto la composición de esta novela: "Mi familia quedó sorprendida".

"Me entusiasman las historias bien contadas pero sobre todos aquellas relacionadas con el realismo mágico. Siempre busco lecturas que me cuenten algo que normalmente sea imposible y que tengan la facilidad de hacérmelo creer como posible". Y así fue como comenzó la historia de "Un fantasma inquieto". En realidad la narración, "con un lenguaje llano y sencillo", la inició para un trabajo que le encargaron en un curso de gallego. "Entonces era un cuento de 12 páginas en gallego, me gustó tanto que lo traduje al castellano y lo convertí en un libro de más de 200".

"Un fantasma inquieto" abarca desde la Guerra Civil a la actualidad. Cuenta la historia de un joven, Breixo, que a los 20 años se muere ahogado y resucita como fantasma en el mundo de los vivos, desde un pueblo de Coruña viaja a Porriño en busca de la Bruja Moncha, ella y otros fantasma que conoce por el camino le ayudan y enseñan a vivir como tal, hacerse visible para los vivos, mover objetos e incluso se dio cuenta que podía llegar a curar. Viajó por varias localidades gallegas y también del extranjero, llegando a Edimburgo. Tras un largo periplo volvió a su aldea en donde se enamoró de una humana, Valentina, con la que tuvo hijos y envejeció.

La Malladoura, la casa del Concello, el bar La Cueva o Villa Florida son algunas de las localizaciones porriñesas que figuran en el libro, sin olvidarse tampoco de la estación de tren con el paso a nivel "muy peligroso".